Ni Atlético y Real, ni mar y montaña: los madrileños se dividen realmente entre los que tienen coche y los que no. Los primeros tienen acceso a unos planes a los que los otros tienen que resignarse a vivir sin ellos: compras en la periferia, excursiones a la sierra, no preocuparse por los horarios del metro... Pero a cambio, los propietarios de un vehículo tienen que cargar con preocupaciones y gastos que no existen en la mente de los no propietarios. Poder usar un coche sin la necesidad de ser su propietario sería la solución más cómoda para una gran parte de la población.
En breve car2go, el servicio de alquiler flexible que patrocina este artículo, llegará a Madrid y ofrecerá un novedoso sistema de alquiler de coches en el que se paga por minutos. Los vehículos son eléctricos y no están concentrados en un punto fijo sino repartidos por toda la ciudad. Se localiza el más cercano a través de una aplicación para el móvil, a través de ella también se reserva el coche y, una vez usado, se deja con total libertad en otro punto de la ciudad. Una solución perfecta tanto para previsores como para impulsivos.
Con motivo de su lanzamiento están de promoción: quien se registre ahora en la web se lleva los primeros 60 minutos gratis. Así que para aprovecharla te proponemos algunos planes para aprovechar esa primera hora que sin coche serían un incordio pero que con car2go puedes hacer fácilmente y encima gratis.
1. Una compra de última hora: te has metido en la cocina con la intención de crear una obra maestra con tus propias manos pero, cuando estás a punto de terminarla, te das cuenta de que te falta el ingrediente estrella, el que nunca tienes en la nevera y ni sueñas con encontrar en el chino de debajo de casa. Por fortuna sabes que en los mercados de Madrid, como el de San Miguel o San Antón, puedes conseguir todo lo que necesitas. Solo te hace falta pillar el coche que te lleve hasta ellos en un momento.
2. Jugar al golf: no hace falta cambiar de provincia para practicar el swing. Bien sea en el centro o en las afueras, es posible abandonarse a este deporte sin salir de Madrid, sin necesidad de jugar 18 hoyos y ahora sin necesidad de cargar con tus palos gracias al maletero. Empieza a impresionar a tu jefe y plantarle cara al amigo que siempre te gana, y en cuanto te canses te vuelves a casa en un santiamen.
3. Comer de otra manera: al margen de las modas, los food-trucks nos permiten descubrir todo tipo de gastronomías de una forma rápida y accesible. De un tiempo a esta parte, Madrid está repleta de eventos donde probar esta nueva forma de restaurante con ruedas: existe ya una Asociación de Food Trucks de Madrid y Madreat es el evento de este estilo en España, que se celebra una vez al mes en pleno centro. Estén donde estén, podrás aparcar muy cerca porque los coches eléctricos de car2go pueden usar las zonas verdes y azules de manera gratuita.
4. Plantar tu propio árbol: de las tres cosas clásicas que supuestamente hay que hacer en la vida, sin duda esta es la más sencilla de cumplir y además nos ayuda a mantener nuestra ciudad algo más verde, pero no es algo que se pueda hacer en cualquier sitio. A finales del año pasado, los madrileños pudieron plantar sus propios árboles en el Bosque de los Ciudadanos del Parque Forestal de Valdebebas. La Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA) y otras instituciones similares nos informan de cómo poder hacerlo.
5. Ir a esa exposición que lleva meses: seguro que lo has vivido: es la retrospectiva de la temporada, llevas meses planeando ir, pero de repente y sin saber cómo es el último día, el museo está a punto de cerrar y solo una escapada de última hora puede evitar la culpabilidad cultural. Un ejemplo: la muestra de fotografía de Josef Koudelka que organiza la Fundación Mapfre de Madrid está en la Sala Bárbara de Braganza hasta el 29 de noviembre. El día 28 nos lo agradecerás.
6. Darte un regalo merecido: o más que regalo, a veces lo que tenemos es necesidad de un masaje, ya sea thai, védico o sueco, que nos ayude a desconectar un rato del mundo. Llamamos para probar suerte y (¡oh, milagro!) se les ha quedado un hueco libre justo en lo que tardas en reservar el coche, plantarte ahí y aparcar en la puerta para mejorar el transcurso del día de una forma considerable. Un epic win inesperado.
7. Una reunión diferente: los encuentros profesionales no siempre exigen de un lugar formal dónde celebrarse; de hecho, algunas veces se necesita todo lo contrario. Cada vez hay más hubs y coworkings profesionales en la capital para poder trabajar, como el recientemente inaugurado Campus Madrid de Google donde se pueden usar sus mesas de reuniones de manera gratuita (¡y con WiFi!). Mirar a los ojos a tu compañero o cliente y proponerle cambiar de escenario puede ser la clave para mejorar la jornada laboral.
Artículo patrocinado por car2go.
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