Si estás de exámenes, quizás haya llegado a tu muro de Facebook este texto sobre los sacrificios de la época de exámenes: desde el viernes pasado se ha compartido más de 120.000 veces.
Su autora, una joven de casi 25 años que prefiere mantener su anonimato, explica a Verne en conversación telefónica que estudió Derecho y que tiene muchos amigos opositores, que “compartían conmigo sus agobios”. A partir de esta experiencia decidió escribir un texto que anima a no rendirse a pesar de todo el tiempo que hay que dedicar a estudiar, renunciando a menudo a muchas cosas en apariencia más agradables: “Añoras tu tiempo libre, tus amigos, tu siesta”, escribe, antes de añadir: “No te rindas, porque sé que en mitad de esa soledad de las noches en vela y los cafés cargados, sonará el teléfono y encontrarás una voz amiga que conseguirá animarte”. Y gracias a todo ese sacrificio "ese futuro que tanto ansías llegará, más tarde o más temprano, pero llegará”.
Eso sí, la autora tampoco apuesta por la vida monacal y la renuncia a los placeres del mundo. “En los comentarios que he podido leer, algunos me dicen que no puedes dejar tu vida de lado por los estudios, pero digo justo lo contrario”, nos dice. Ella hace mención de las etapas en las que hay que apretar más, pero también anima a disfrutar “de los pequeños ratos” de descanso incluso en los días más intensos.
Ni siquiera ha podido leer todos los comentarios: “Es imposible”. Normal, ahora mismo, apenas cuatro días después de haberlo publicado, lleva unos 12.000, sin contar los mensajes directos que también ha recibido. En su mayoría, son respuestas positivas: “Es una época de mucho estrés y muchos se han sentido identificados”.
La autora abrió su página de Facebook, Dinamita en los ojos, en otoño del año pasado. Desde entonces, el público ha ido creciendo paulatinamente, pero nunca había visto una repercusión parecida de uno de sus textos: “Volví a entrar unas horas después de haberlo publicado y no podía creer en qué se había convertido”. Desde el viernes, la página ha pasado de 10.000 a casi 55.000 seguidores.
No se lo esperaba: de hecho, nos cuenta, se trataba de un texto antiguo que tenía guardado en su ordenador. “Me acordé de que lo había escrito y pensé que sería buena idea publicarlo porque mucha gente se podía sentir identificada. Me imaginé que igual le gustaría a, no sé, 300 personas”. El texto acumula más de 80.000 reacciones. No niega que haber sumado tantos seguidores en tan poco tiempo “abruma un poco”. Y explica, por ejemplo, “que antes contestaba a la gente que comentaba, pero ahora es imposible”.
Nos cuenta que escribe “desde que tengo uso de razón” y que le gustan autores como Gabriel García Márquez y Almudena Grandes. Dado el tono de muchas de sus publicaciones, no es de extrañar que también lea y siga a Marwan, Diego Ojeda y Andrés Suárez, poetas y cantautores muy queridos por el público joven y también muy activos en redes sociales.
Ella publica directamente en Facebook, aunque también tiene un blog. Le gusta publicar en esta red “por el alcance. Del mismo modo que en mis textos quiero hablar de cosas que le pasan a todo el mundo, también todo el mundo está en Facebook”. Y es que sus escritos se centran en experiencias cotidianas: “La gente me dice que explico de forma sencilla y elegante cosas que todos sentimos”.
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