La Policía Nacional está investigando la supuesta agresión con gas pimienta del youtuber malagueño Abel García, de 27 años, a una persona con apariencia de repartidor de pizzas. El supuesto ataque se produce en un vídeo titulado Broma a pizzero le echo gas pimienta sale muy mal, que García subió a su canal de YouTube el 6 de febrero. Según señalan a Verne desde Policía Nacional, todo apunta a que la escena es un montaje, pero la investigación sigue en curso. El youtuber defiende la veracidad del vídeo, que ha atraído mucha atención mediática en los últimos días.
El vídeo fue eliminado por YouTube "por infringir las normas sobre acoso e intimidación", aunque sigue disponible en otros canales. "Chicos, viene para arriba el pizzero. Mirad la sorpresita que le tengo preparada", dice el youtuber en el comienzo del vídeo, mientras enseña el supuesto bote de gas pimienta.
Poco después el repartidor toca al timbre, el youtuber recoge la pizza y la lleva a la cocina. Allí, rocía la sustancia en la pizza con un espray. Tanto la cara del repartidor como el logo de la pizzería se muestran desenfocados en todo momento. "No sé que le pasa a esto, mira", añade García mientras sale de la cocina con la pizza, para después abrir la caja frente al repartidor, supuestamente afectado por el gas pimienta, de cuyos efectos también de queja el youtuber.
La Policía Nacional reconoció el uniforme del supuesto repartidor como el que usan en Domino's Pizza, según confirman a Verne fuentes policiales. Varios agentes se desplazaron a las pizzerías de la franquicia en la ciudad de Málaga. Ninguno de los trabajadores declaró haber sido asaltado por el youtuber, de manera que no consta ninguna denuncia por los hechos que recoge el vídeo.
Otro de los motivos que incitan a pensar que el vídeo podría ser un montaje es la forma en la que el repartidor entrega la pizza. Según la responsable del Domino's Pizza de la Plaza de la Libertad en Málaga, Montserrat Mesa, el supuesto repartidor no lleva el calzado reglamentario: "Todos los repartidores de España van siempre con calzado negro. En el vídeo, sus zapatos son marrones".
"Además, siempre entregamos las pizzas a cada casa dentro de una bolsa térmica. En el vídeo, el chico lleva la caja sin nada más. Normalmente, el repartidor se quita el casco y se pone la gorra al llegar a la puerta, a diferencia de lo que se ve en el vídeo. Y la chaqueta es una de las antiguas. Los repartidores siempre van con las nuevas, que son diferentes a la del vídeo", dice Mesa. Asimismo, la responsable del establecimiento malagueño también descarta que la caja, que en un momento del vídeo aparece sin desenfocar, proceda de un Domino's: "Todas nuestras cajas son rojas, blancas y azules. Esa caja no es nuestra", añade Mesa.
García colgó otro vídeo con una broma similar el mismo día. En esa escena, el youtuber recibe una pizza, la llena de pepinillos al llegar a la cocina y después se queja de que los ha pedido sin ellos. Domino’s Pizza tampoco tiene constancia de que alguno de sus trabajadores haya sufrido algo parecido.
El youtuber sostiene que el vídeo no es un montaje. "La escena del vídeo es real. Pedí la pizza a una pizzería de Málaga", dice García a Verne por teléfono. Al exponerle todas las pruebas de que su vídeo podría ser un montaje, el youtuber mantiene su versión: "Hice esa broma, pero estoy muy arrepentido. Viendo que a otros youtubers les ha ido bien con este tipo de contenido pensé en hacerlo. Llevó en YouTube desde 2011 y no conseguía crecer. Sé que el 80% de España me odia".
García tiene 15.000 suscriptores en YouTube, lejos de las millonarias cifras de otros youtubers. Según datos de la web Social Blade, este número no ha crecido significativamente en las últimas semanas.
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