El éxito de Frozen sorprendió a muchos el año pasado: parecía un película convencional de Disney, alejada de la estética renovada de Pixar. Aun así, la cinta fue un éxito y ya es la quinta película más taquillera de la historia y la primera de entre las animadas, superando a Toy Story 3.
La marca también está arrasando en el sector de los juguetes: niñas y niños se han visto atraídos por las princesas Elsa y Anna, además de por el humor del muñeco de nieve Olaf. “Las claves del éxito de esta propiedad se basan en la gran acogida de la película -explica Marisa Martí, vicepresidenta y directora general de productos de consumo y retail en The Walt Disney Company para España y Portugal-, que ha sabido retomar una propuesta clásica añadiendo un desenlace inesperado, moderno y novedoso, lejos de clichés tradicionales”.
“El año pasado -añade- la demanda sobrepasó todas nuestras expectativas y ya se perfila que va a ocurrir lo mismo estas Navidades”, en especial en lo que se refiere al disfraz de Elsa y a las muñecas de las princesas. De hecho, la muñeca de Mattel de Elsa es el tercer juguete más vendido en España entre enero y noviembre de 2014, según la empresa NPD, que analiza datos del mercado juguetero en todo el mundo. Y Amazon vendió 180.000 unidades de esta muñeca en España sólo el 16 de diciembre, convirtiéndose en el producto más vendido durante la jornada de mayor volumen para la empresa desde que está en nuestro país, tal y como recoge la revista especializada en el sector Juguetes B2B.
En lo que se refiere al disfraz, que ya fue un éxito en Halloween, Elena Trujillo, responsable de comunicación de Disney en España, pone un ejemplo que ilustra la pasión que despierta: “Hace unas semanas inauguramos la tienda Disney Store de Barcelona y una señora hizo horas de cola para entrar y nos contaba que venía desde Bélgica para comprarlo”.
La muñeca de Elsa es el tercer juguete, por detrás tanto de Furby como de la colección de Star Wars de LEGO, pero "la primera marca en el mercado de juguetes de niñas" si se suman las ventas de todos sus productos licenciados, apunta Martí, de Disney. No se trata sólo de muñecas y disfraces: “Una amplia gama de productos de Frozen como puzzles, libros o juegos orientados a un target mucho más familiar cuentan también con una demanda excepcional”. Además, Frozen es el DVD de Disney más vendido en España desde 2007, con 200.000 unidades.
Por supuesto, la tendencia es mundial: también según NPD, en el Reino Unido, principal mercado juguetero de Europa, Frozen cuenta con tres juguetes en el top 5 de 2014 hasta el 11 de octubre: la muñeca de Elsa, fabricada por Mattel (en el primer puesto); la princesa Anna, también de Mattel (3), y la muñeca Elsa Brillo de Nieve, de Jakks Pacific (4).
En Irlanda había colas para esta última muñeca ya en noviembre. Y la juguetería británica The Entertainer vio cómo su web se caía dos veces el mismo día que sacaba a la venta dos mil unidades del juguete. Además, decidió restringir su compra a una por persona para intentar evitar, o contener, la venta en Ebay. Aunque obviamente, la muñeca llegó a esta plataforma, donde llegó a costar el doble (unos 60 dólares) antes de Navidad.
La música ha sido otro factor decisivo en el éxito de la marca: la banda sonora lleva vendidas casi 3,5 millones de copias desde enero y podría acabar como el disco más vendido del año, con permiso de Taylor Swift. Además, ha estado en lo más alto de los discos más vendidos durante 13 semanas no consecutivas a lo largo del año. Otro dato que refleja lo mucho que gusta esta canción: el vídeo de Let it go ha sido visto en Youtube casi 390 veces. Y la versión karaoke, más de 270 millones. Por si queréis verlo una vez más, aquí está:
En mayo la consultora FBR apuntaba que Frozen podría traer a Disney ingresos de entre 500 y 1.000 millones de dólares sólo en producto licenciado (juguetes, disfraces, mochilas...). Por comparar, Toy Story sigue suponiendo unas ventas anuales de 1.000 millones y la marca Princesas Disney, 4.000 millones. Eso sí, eso fue antes de que se confirmara la secuela, aunque Bob Iger, consejero delegado de Disney, ya había apuntado que la empresa seguiría aprovechando el empuje de la marca al menos los próximos cinco años.
Es decir, hay Frozen y Elsa para rato. Y Elsas: cada vez más padres están llamando a sus hijas con ese nombre. Según la página británica Babycenter, el nombre era a mediados de 2014 el 88 más popular en Gran Bretaña. El año pasado estaba en la posición 331.