El trabajo de community manager ofrece pocas oportunidades para reír el último. Lo normal es tener que vender con más o menos humor los productos y servicios de la empresa, además de lidiar con las quejas y consultas de los clientes: facturas mal cobradas, retrasos en los envíos, defectos en los productos... Como mucho, la interacción con otros tuiteros se limita al clásico: "Pásame tus datos por DM y te atenderemos". Y todo eso además de tener que soportar con resignación las bromas de los graciosillos en Twitter. Que están por todas partes.
Pero a veces, sólo a veces, los responsables de comunicación en redes sociales se pueden permitir contestar con algo de humor y caradura a alguno de estos tuiteros que ha intentado colársela. Por ejemplo, en el caso de Air Europa, que se topó con un usuario que quiso probar suerte con una broma ya conocida.
No es el único. Por ejemplo, el community manager de Renfe es recordado por esta respuesta que recoge la broma iniciada por la tuitera:
De todas formas y como viajeros habituales en tren, esta otra respuesta nos gusta aún más.
Responder con gracia a los insultos no tiene por qué estar reñido con ofrecer un servicio adecuado a los clientes y usuarios de la empresa, incluyendo la respuesta a consultas y quejas de todo tipo.
Por supuesto, no hace falta ser maleducado para quedarse con el cliente. Se puede ser simpaticote.
El fenómeno de la ruka ya fue muy comentado. Pero a muchos se nos escapó este intercambio de impresiones entre el supermercado y su troll, una vez se calmó la tormenta.
Telepizza respondió así a la petición del monologuista Juan Carlos Córdoba, que quería hacer aprovechar la promoción de pizzas con forma de corazón en San Valentín para soltar un chascarrillo.
Con los pobres pizzeros hay tradición, sobre todo desde este famosos troleo a Domino’s.
-Encargué una pizza y vino sin nada encima, sólo pan.
-Lamentamos oír esto. Por favor, ponte en contacto con nuestros amigos de @dominos_uk para que te puedan ayudar.
-No te preocupes: abrí la pizza al revés :/
Una tuitera intentó adaptar la broma para hacérsela a Telepizza, pero no le salió bien, entre otras cosas porque a estas alturas ya nos sabíamos todos el chiste, igual que ocurrió con Air Europa y el bulto extra.
Si se quiere repetir una de estas bromas, hay que cambiar un poco la historia. Y siempre es mejor variar de sector de actividad para así pillar por sorpresa al CM. Como en este ejemplo, que el community de Mercadona supo encajar con resignación cristiana (hasta luego, ya si eso nos llamamos):
De hecho y a pesar de lo a gusto que se quedan los community en estas escasas ocasiones y de la (por lo general; no siempre) acogida positiva hacia estas actitudes que al fin y al cabo son humanas, lo más habitual es tener que soportar las críticas.
En otros casos, los zasca son gratis. ¿El community manager de la marca de palomitas para microondas Popitas es culé?
Por no hablar del community de Ballantine’s, que ni Carlos Boyero.
La cosa acabó en campaña: #ElQueValeVale, con vídeo incluido en el que el actor Manuel Tallafé interpretaba al community de la marca de whisky. ¿Estaba la campaña planeada desde el principio, como sospecharon algunos tras ver esta foto del youtuber protestón en la fiesta?