Bluper, la web especializada en información sobre televisión, se ha convertido este lunes en trending topic en España. A primera hora de la mañana, en un texto titulado "Que nadie nos calle", la redacción denunciaba lo que consideran un ataque a la libertad de expresión por parte de José Luis Moreno. El productor de televisión ha enviado al medio una demanda de conciliación previa a la interposición de una querella por la publicación de dos artículos sobre sus programas en TVE. La denuncia solicita que "no se vuelva a efectuar ningún artículo en estos términos" y solicita el abono de 332.000 euros en concepto de indemnización.
En el momento en que Bluper ha publicado su comunicado de rechazo, se ha producido el denominado efecto Streisand: un intento de censura hacia un hecho hace que este se divulgue aún más. En este caso con el hashtag #TodosConBluper y una petición en la plataforma change.org para que se retire la demanda. A diferencia de otras ocasiones, no ha sido algo espontáneo, sino que los afectados han intentado que su situación se conociera lo máximo posible y para ello han acudido a las redes.
"José Luis Moreno es un gigante y nosotros somos tres periodistas que lanzamos este proyecto en noviembre, así que cuando nos enteramos fue un shock", cuenta Juanma Fernández por teléfono, uno de los fundadores del proyecto. "La campaña en redes es la única manera que veíamos de que se sepa lo que nos ha pasado. Estamos muy agradecidos con el ruido que se ha montado y con todos los que están tuiteando con #TodosConBluper y ayudando a que se difunda. Detrás del hashtag hay gente anónima y también compañeros de profesión y nos sentimos arropados".
La iniciativa tanto de recoger firmas (son más de 2.200 desde la noche del domingo) como de lanzar el hashtag parte de Pablo Herreros, responsable de la agencia Goodwill Comunicación especializada en medios. "Los periodistas de Bluper me llamaron para pedirme ayuda", cuenta al otro lado del teléfono. "Mi relación con ellos se limita a que conozco su trabajo desde hace tiempo y nos hemos visto una vez", aclara. Contactaron a Herreros porque, como cuenta en el post que explica esta iniciativa, había sufrido una situación similar. "Él también ha pasado por esto", dice Juanma Fernández.
En 2011, Herreros inició otra petición tras la emisión en el programa La Noria de Telecinco de una entrevista con la madre del Cuco, uno de los implicados en la desaparición de Marta del Castillo. "La campaña consistía en que las marcas retiraran la publicidad de un espacio en el que se pagaba [10.000 euros] a criminales", recuerda. Lo consiguió. La respuesta de Mediaset fue una querella por la que se le solicitaban cuatro millones de euros, tres años de cárcel y el embargo inmediato de sus bienes. Tras una nueva campaña en la red liderada por el periodista Mario Tascón, la cadena reculó.
Desde ese momento, Herreros asegura tener un vínculo emocional con situaciones de este tipo. "Sé lo que se siente cuando un transatlántico embiste a tu pequeña barquita y siempre he sido un defensor de la democracia y el periodismo", afirma.
Fernández y sus compañeros esperan que TVE se pronuncie al respecto o incluso intervenga. "Se trata de una crítica televisiva en la que consideramos que no se falta al respeto a nadie, sino que se habla de un programa. Algo tendrá que decir TVE, porque se trata de un programa que se emite en su cadena", dice.
El productor considera objeto de demanda un artículo en el que, según explican en Bluper, "se recopilan y enumeran informaciones publicadas por otros medios de comunicación sobre impagos y deudas con sus empleados". En el segundo texto publicado se realiza una crítica sobre su programa en la pasada noche de Reyes. "Una columna de opinión perfectamente identificada", escriben desde la redacción. "Resulta inadmisible que José Luis Moreno intente impedir que se diga y se denuncie que la televisión pública, nuestra TVE, no debería contratar los servicios de personas juzgadas y condenadas por vulnerar los derechos de varios de sus trabajadores (sentencia del Juzgado de lo Social de Madrid). Y resulta preocupante que José Luis Moreno lleve hasta un juez las críticas sobre su trabajo como productor".
A pesar del ruido despertado, el proceso sigue su curso. Las dos partes se verán las caras el 14 de abril en un acto de conciliación, "en el que vamos a presentar nuestra batalla, porque creemos que no se puede atacar así la libertad de expresión", dice Juanma Fernández.