Laura y Howard tienen 92 y 93 años y han estado casados durante 73. Como muchas parejas, tienen una canción que les une especialmente. La suya es You’ll never know, un tema que solía reconfortar a Laura cuando Howard fue enviado al frente durante la Segunda Guerra Mundial.
Cuando el matrimonio celebró sus 50 años de casados, interpretó el tema a dúo delante de sus invitados y era habitual que lo cantasen también cuando se reunían en familia. Ahora que Laura, ingresada en un hospital de cuidados paliativos y muy debilitada, no puede cantar ha sido Howard quien ha querido cantar el tema para ella a pie de cama. El emotivo momento, grabado por su nieta en la habitación del hospital y subido a su canal de YouTube, ha superado en cuatro días los cuatro millones de reproducciones.
“Tuve la suerte de captar este momento precioso”, señala Erin Solari en la información que acompaña el vídeo. “Antes de comenzar a grabar, mi abuela -que apenas puede ver y solo distingue sombras- al escuchar que mi abuelo estaba en la habitación, preguntó si podría abrazarlo. El abuelo no puede mantenerse en pie por sí solo, pero inmediatamente acercó su silla a la cama para poder hacerlo. Mi prima Serena, que es terapeuta, le ayudó a levantarse y lo sostuvo a lo largo de toda la canción.”
"Te quiero", le dice Laura después del abrazo y de que él bromease preguntando si había sido su mejor amante. Howard acaricia su cara y comienza a recitar las primeras líneas de la canción:
"You'll never know just how much I miss you
You'll never know just how much I care
And if I tried, I still couldn't hide my love for you"
"Nunca sabrás cuanto te echo de menos. Nunca sabrás cuánto me importas. Y aunque lo intente no puedo ocultar mi amor por ti". Laura escucha atenta y, dirigiendo la mirada hacia donde está su nieta, dice divertida: "¿No es adorable? Creo que le gusto".
Desde que se publicase el vídeo, primero en Facebook y después en YouTube, la situación de la anciana ha cambiando. Según explica su nieta ha abandonado el hospital y se encuentra en casa: "Mi bonita abuela Laura Virginia -a la que en principio le daban una semana de vida- continúa con nosotros y está en casa descansando tranquila. Mi familia y la maravillosa gente del hospital están cuidando de ella para estar seguros de que no sufre y está lo más cómoda posible mientras se prepara para dejarnos. Todos os damos las gracias por vuestro amor y amabilidad".