Más allá del tráfico: ¿cómo te afecta la contaminación de estos días?

Respondemos a seis preguntas que quizás te estés haciendo, como si puedes salir a correr

Madrid, el 12 de noviembre

El Ayuntamiento de Madrid ha ampliado este viernes las restricciones al tráfico por contaminación. No se puede circular a más de 70 kilómetros por hora en las vías de acceso a la ciudad y además se prohíbe aparcar en los aparcamientos regulados del centro a quienes no sean residentes. Con excepciones, como el transporte público, los vehículos para personas con movilidad reducida y los "cero emisiones", entre otros.

Con estas restricciones se espera reducir los altos niveles de dióxido de nitrógeno y otros compuestos nocivos, aunque como explica Materia, es difícil aplicar una solución sencilla a un problema complejo: aunque la limitación de velocidad tiene efectos positivos (de hecho, ha funcionado en otras ciudades), los vehículos modernos “son mucho más sensibles a la aceleración que a la velocidad media”.

Pero claro, no todos tenemos coche y muchos (obligados o concienciados) lo habrán dejado aparcado estos días. ¿Qué más hemos de tener en cuenta en lo que se refiere a la polución?

1. ¿La contaminación afecta a mi salud?

No es sólo una cuestión de llegar tarde por culpa de los atascos, sino que la contaminación del tráfico tiene efectos perjudiciales para nuestro organismo. Según datos publicados por la Sociedad de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) en 2010, 16.000 españoles mueren cada año por culpa de los efectos de la contaminación atmosférica y el 84% vivimos en zonas que exceden los límites establecidos por la OMS. La Agencia Europea de Medio Ambiente incrementa la cifra total hasta las 25.000 defunciones. Según Separ, esta contaminación atmosférica vendría producida por fuentes naturales, hogares, instalaciones industriales y la circulación, cuyos humos causarían 5.000 muertes anuales. Por comparar, en 2014 fallecieron 1.131 personas en accidentes de tráfico.

2. ¿Y si no vivo en Madrid?

La contaminación por dióxido de nitrógeno está asociada mayoritariamente al tráfico, por lo que las ciudades con más contaminación son las que muestran más congestión. Además de Madrid, la situación tampoco es positiva en ciudades como Barcelona, Valencia, Granada y Murcia. Además de eso y como nos recordaba hace unos meses Paco Segura, coordinador de Ecologistas en Acción, hay que tener cuidado con los niveles de ozono, que crecen sobre todo en verano y que por efecto de las brisas afectan especialmente “donde esperamos respirar aire limpio”. Es decir, en las afueras de las ciudades.

3. ¿Puedo consultar los niveles de contaminación antes de salir de casa?

En el caso de Madrid, hay una página web que permite consultar los índices por distritos, pero que la mañana del jueves estaba caída. La página del Ayuntamiento de Barcelona da buenas previsiones tanto para mañana como para pasado mañana.

En marzo entró en vigor en Madrid el protocolo que se está implementando por primera vez estos días y que rebajó la proporción de contaminación que activa los niveles de preaviso y aviso.

4. ¿Qué precauciones debo tomar? ¿Puedo hacer deporte?

Es recomendable ventilar la vivienda aprovechando los momentos de menor contaminación, que suelen ser al amanecer.

Hay que evitar el ejercicio físico al aire libre, ya sea correr o ir en bici. Tal y como explicó a Verne hace unos meses el doctor Francisco Feo, coordinador del comité de aerobiología de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, “la actividad aumenta la frecuencia respiratoria y, en consecuencia, la cantidad de contaminantes que inhalamos”. Sí podemos hacer ejercicio físico en el gimnasio o en casa. De hecho y según este experto, cuanto menos salgamos de casa, mejor. Segura añadía que podemos correr en un parque, pero solo cuando si bajaran los niveles de contaminación.

En cuanto a las mascarillas, si no tienen los filtros adecuados "solo protegen de las partículas más grandes, pero no de las pequeñas, que son las más peligrosas. No tienen filtro para el dióxido de nitrógeno ni el ozono -nos explicaba Segura-. Para eso harían falta mascarillas más sofisticadas y caras". Estas partículas más pequeñas no solo van asociadas a los problemas respiratorios habituales con la contaminación, sino que también pueden penetrar en la sangre y provocar dolencias cardiacas y neurológicas, según explica el doctor Feo.

5. ¿Quién debe tener especial cuidado?

La polución es especialmente nociva para las personas con asma, explica el doctor Feo, que ya tienen “una inflamación bronquial de base y presentarán síntomas con cantidades de polución inferiores”. Además, esta contaminación exacerba las alergias, ya que "provoca que se liberen pólenes más agresivos". Asimismo, "empeora el estado y aumentan los ingresos de personas con otras dolencias respiratorias, como la bronquitis crónica”.

La contaminación también afecta a “niños, cuyos bronquios son inmaduros y que además pasan gran parte de su tiempo al aire libre, jugando y por tanto realizando actividades físicas más intensas”.

Es asimismo más peligrosa para ancianos e incluso embarazadas: “Se ha comprobado que tiene efectos similares al humo del tabaco, lo que puede causar que los niños nazcan con menos peso y menos desarrollo”. Hablando de tabaco, los fumadores también lo tienen peor: la polución “añade más problemas, ya que tienen una inflamación previa a nivel respiratorio”.

6. ¿Cuándo va a terminar todo esto?

Quizás agradezcas estos días de sol y cielos despejados, pero la ausencia de viento y lluvia favorece la concentración de partículas contaminantes. Según el doctor Feo, el clima seco y frío favorece que los contaminantes queden atrapados a bajas alturas sin disolverse. Las previsiones apuntan a buen tiempo para los próximos días, así que habrá que esperar a una tormenta que nos deje en casa una tarde, pero que nos permita salir al día siguiente.