Los profesores cada vez se esfuerzan más por motivar a sus alumnos y conseguir que acudan felices a clase. El refuerzo positivo es, para muchos profesionales, una herramienta fundamental en la educación de niños y jóvenes, así que no es de extrañar que cada vez veamos más iniciativas en esa línea.
La última llegaba hace una semana desde la Escuela de Primaria Evergreen Avenue, en Woodbury, Nueva Jersey. Era el momento de enfrentarse a los exámenes para cambiar de grado y una profesora, Chandni Langford, quiso motivar a sus estudiantes dejándoles un mensaje personalizado escrito en sus pupitre: "Lis, recuerda: no hay un ascensor que te lleve directo hacía el éxito ¡debes utilizar las escaleras!" o "Kwydir, ¡aprender es tu superpoder. Recuerda, nunca dejes de intentarlo y nunca dejes de estimular a tu cerebro".
Las fotos con los textos inspiradores fueron compartidas en la página de Facebook de Woodbury City Public Schools y desde allí se han compartido miles de veces en las redes sociales.
"Escribí los mensajes individualizados para mostrar a los chicos que esta mentalidad de crecimiento está relacionada con cada uno de ellos " explica a Verne por email la profesora, "No se trata de un gran concepto que no puedan entender. Todos pueden comprenderlo e interiorizarlo".
Langford señala que ha tenido mucha suerte porque trabaja en un centro y una comunidad que valora e incide en una educación muy personalizada, y reflexionaba sobre la abundancia de los exámenes en el sistema educativo: "Creo que uno de mis mayores miedos es que algunas veces examinamos a los niños demasiado. ¡Dejémosles que sean niños!".
Aunque sus notas inspiradoras han tenido una extraordinaria acogida en las redes sociales, Langford explica que son ideas con las que sus alumnos están bastante familiarizados: "En mi clase hablamos de la mentalidad de desarrollo todo el tiempo. Hemos llegado a un punto en el que incluso no es necesario explicarlo más. Si un estudiante se frustra y dice algo similar a 'Me doy por vencido', los otros niños le responderán con frases motivacionales. 'Puede que te lleve algún tiempo y esfuerzo', 'No va a ser fácil, pero merecerá la pena' y 'Siempre puedo mejorar, voy a seguir intentándolo' son algunas de sus favoritas".
Las notas, escritas con rotuladores permanentes, desaparecieron de los pupitres minutos después de que los chicos llegasen a clase - "No está permitido nada de esto durante las pruebas, así que los borramos todos antes de comenzar los exámenes". Sin embargo, la trabajadora social del centro ya los había fotografiado y mostrado a la directora antes de acordar publicarlos en Facebook. "Todo esto me pilló mientras estaba supervisando la prueba ¡así que no tenía ni idea!".