La desomorfina es una sustancia que en los últimos días se ha convertido en habitual en los titulares con el nombre de krokodil. Esta droga provoca lesiones en el cuerpo de tono verdoso y aspecto escamoso. Recuerdan a la piel de un cocodrilo y por eso han servido para disparar su interés mediático. Hablamos con el doctor Gonzalo Haro Cortés, quien ha formado parte del estudio centrado en el primer caso surgido en España. El médico del Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón se ha especializado en analizar la relación entre las enfermedades mentales y el consumo de otras sustancias. Algunas son tan sorprendentes como el spice y la droga caníbal.
En el estudio Consumo de krokodil por vía oral en España: a propósito de un caso se analiza a un hombre de 34 años adicto a la cocaína y la heroína. El paciente se presenta en un centro médico de Castellón de la Plana, con picores en todo el cuerpo, vómitos y alteración del ritmo respiratorio. El personal sanitario no tiene que descubrir la razón de esos síntomas, porque el propio paciente les informa de que ha consumido krokodil por vía oral. Es la llamada 'heroína de los pobres', al ser muy similar a ella, aunque más barata. Este es el primer caso conocido en nuestro país.
- Pregunta: ¿Cómo ha llegado el krokodril a España?
- Respuesta: Castellón cuenta con una elevada presencia de inmigración de Europa del Este, zona de donde procede este paciente y en donde es muy popular esta droga. Contó que se lo había pasado un amigo, sin explicarle las consecuencias de su uso. Como en muchos otros casos, la razón para probar drogas desconocidas es en parte curiosidad y en parte adicción.
- P: Del krokodil se dice que es la heroína de los pobres, ¿significa que vamos a encontrarnos a gente con la piel de cocodrilo en la España de la crisis?
- R: Lo importante es saber que no va a ser una epidemia en España. Las circunstancias en países del Este son muy distintas de las del nuestro, que está muy abastecido de otras opciones gratuitas para los adictos a la heroína. Contamos con un tratamiento a la adicción tan desarrollado que nadie recurriría a krokodil cuando puede obtener metadona. Probablemente, es algo que no ocurra en los países donde sí se consume.
Como nos indica el investigador, la situación es diferente en cada país. Un documental de Vice explica que en Rusia la metadona está prohibida. Por eso en regiones como Siberia el consumo de krokodil, que suele inyectarse en vena, está muy extendido. Devora la piel y la carne hasta alcanzar el hueso. Se ha exportado a México y también a Estados Unidos, según American Journal of Medicine.
A través de este enlace se puede ver una imagen publicada en la revista médica estadounidense con los efectos, en estado solo inicial, de la droga en la pierna de un paciente.
Indicios de los efectos de krokodil en la mano de un consumidor / VICE
- P: ¿Entonces la intención al publicar este artículo es mostrar las nuevas realidades de drogas que desconocemos?
- R: Exacto. No se trata tanto de centrarse en el krokodil como de ser conscientes de que cada vez se consumen más sustancias de la que no tenemos información suficiente. Mi labor y la de mis compañeros es la de estudiar el cerebro. Y la gente hace cada vez hace cosas más raras con él, al experimentar con sustancias. Aprendemos poco a poco las consecuencias de esos experimentos
- P: Y hay médicos y enfermeros que no sabrán ni siquiera que existen estas drogas.
- R: Buscamos que los profesionales sanitarios mantengan la mente abierta y sepan qué está pasando en el mundo. Viene alguien al hospital con necrosis en los dedos y tenemos que descubrir qué ha hecho, hasta que conectamos lo que le ocurre con una droga concreta que ha consumido y descubrimos cómo tratarlas. Aun así, avanza todo tan rápido que, dentro de diez años, lo que ahora sabemos no servirá de nada. Vamos sobre la marcha.
- P: ¿Qué han aprendido de estas nuevas drogas?
- R: Por ejemplo, a tomar lo antes posible un análisis de orina. Muchas de ellas se eliminan del organismo antes de las doce horas. Por eso hay que entrevistar al paciente. Nuestra labor es un 80 por ciento de ciencia y el resto se basa en analizar el comportamiento humano. Hay que saber escuchar.
- P: Su trabajo recuerda un poco al doctor House.
- R: Sí, pero con una gran diferencia. Los pacientes nunca mienten. Puede que se expliquen mal y terminen diciendo lo contrario de lo que quieren decir, pero no mienten. Surgen cientos de drogas cada año, algunas desaparecen a los pocos meses del mercado, pero otras se quedan.
- P: Muchos de los ingredientes del krokodil se pueden encontrar fácilmente en una farmacia.
- R: Si sabes cómo cocinarlos te la puedes fabricar en tu cocina.
- P: Y seguro que hay tutoriales en internet para estas cosas.
- R: Vivimos en sociedad del conocimiento global. He llegado a ver a una tuitera corregir una nota de prensa médica porque habían hecho una referencia errónea sobre la heroína.
- P: ¿Qué opinión le merece la foto que circula en internet y en los medios de un consumidor de krokodil con una mano verde gangrenada?
- R: No creo que sea una imagen real. Las únicas imágenes fiables sobre este tipo de casos proceden de revistas médicas especializadas.
Nos referimos a la imagen que está apareciendo en televisión y prensa estos días, que es en realidad parte de un vídeo de YouTube del año 2011. Una foto que no resulta creíble en opinión del doctor Haro Cortés.
Él es responsable del Programa de Patología Dual Grave del Hospital Provincial de Castellón y profesor del Grado en Medicina de la Universidad CEU Cardenal Herrera.
Esta nueva droga aparecida en Castellón es solo una de las que ha investigado. En 2014, también publicó un estudio sobre el primer caso de psicosis catatónica causado por un derivado sintético del cannabis, llamado spice y que se trata de marihuana sintética. Asegura haber visto de todo.
- P: Una vez vio a una persona que pasó meses en posición de mantis religiosa tras consumir spice.
- R: Es probablemente el caso más impactante que he tenido. Pero es que el spice es diez veces más potente que el cannabis, así que termina por bloquear el movimiento del cuerpo. Nos hizo plantearnos si está relaciondo que quien consuma porros hoy tenga más posibilidades de desarrollar párkinson en un futuro. Son sustancias de siempre pero multiplicando sus efectos. Por ejemplo, el krokodil es diez veces la morfina.
- P: Son entonces sustancias mutantes, los X-Men de las drogas.
- R: Sí, pero no pretendemos ser moralistas cunado hablamos de ellas. El ser humano ha probado de todo, así se descubrió el café, por ejemplo, pero es importante investigar y conocer las consecuencias del consumo de cada sustancia.
- P: Luego está la llamada droga caníbal.
- R: El problema con ella es que en su caso de sustancia que no deriva de una que ya conozcamos, a diferencia de las otras de las que hemos hablado.
- P: ¿Cómo llegamos a poner esos nombres a estas drogas?
- R: Yo que veo a pacientes sufrir las consecuencias, creo que son nombres bastante crueles. En este caso, además no es del todo correcto. Lo que sabemos es que es una droga que dispara tus instintos. En el caso de droga caníbal que saltó a los medios, a la persona que consumió le dio por morder de forma violenta a un mendigo. Yo en cambio he visto el caso de otro paciente que le afectó en lo sexual. Estuvo muchas horas seguidas masturbándose sin parar. No conocemos todavía cómo funciona.
- P: Hay quien dice que en breve se encontrarán vacunas para los efectos de las drogas.
- R: No exactamente, aunque no es imposible en algunos casos. Aquellas drogas que funcionan inflamando partes del cerebro, se pueden tratar con antinflamatorios que paralicen el efecto. Decir que es una vacuna es decir demasiado.