En la Comunidad de Madrid hay cerca de 16.000 taxis, según el INE, y muchos de ellos son conducidos por mujeres. Aunque el servicio que estas ofrecen es exactamente el mismo que los hombres, existen machistas que todavía tienen reparo en escogerlas. Daniel Díaz, taxista, bloguero y tuitero, dice que vivió de cerca una de estas situaciones junto a una compañera el pasado 7 de septiembre. Tras contarla en Twitter, sus mensajes han superado los 8.500 retuits en menos de 24 horas.
"Estábamos en la parada que hay frente al centro comercial Moraleja Green, una zona con muchas oficinas", afirma Díaz a Verne por teléfono. "Mi taxi estaba el segundo, y el primero era de una compañera. Llegó un cliente y, después de asomarse al primer taxi, pasó de largo y vino al mío".
Díaz dice que preguntó entonces al cliente por qué no había cogido el primer taxi: "Me contestó que tenía que coger un AVE y que con una mujer no iba a llegar a tiempo. El taxista sostiene que se negó al cliente debido a su actitud, y el resto de compañeros de parada le siguieron. "El tipo se puso un poco burro, diciendo que iba a llamar a la policía", cuenta, "y nosotros le dijimos que adelante, que no lo íbamos a coger".
Según la versión de este taxista, la compañera se quedó "alucinada" por la actitud del cliente. "Me miró con cara de '¿pero esto qué es?', aunque lo cierto es que no hablamos mucho más", dice Díaz. "Cogió otro cliente y se fue, y no la conozco personalmente".
El tuitero y taxista afirma que es la primera vez que se topa con una situación parecida en diez años, pero que, "hablando con compañeras he escuchado muchas historias similares, desde malos comentarios a gente que se les ha bajado del taxi".
La actitud de Díaz ha sido aplaudida en redes, donde políticos como Pablo Echenique o Íñigo Errejón, de Podemos, se han hecho eco de sus tuits:
"Alguna vez he tenido tuits muy compartidos", reconoce Díaz, que tiene más de 14.000 seguidores en su cuenta. "Lo que me ha chocado esta vez es la cantidad de gente que me ha escrito para darme las gracias", cuenta. "¿Gracias por qué? Es preocupante que en nuestra sociedad esto se vea como una heroicidad. Lo que he hecho debería ser lo normal ante incidentes así".