Josín Lazcano es un personaje muy conocido en Mieres, Asturias. Llegó a la localidad hace un par de años con un único compañero, su perro Trasgu (nombre de un personaje mitológico asturiano) y vivió en la calle hasta encontrar un lugar en el que pudiera quedarse junto a su can, la casa de un amigo. Ahora, Lazcano se encuentra enfermo, en estado terminal y, antes de que su vida llegue al final, ha conseguido atar un último cabo que no quería dejar suelto: encontrar una nueva familia para su perro.
Lo ha logrado en solo dos días, después de que su historia apareciera en el diario regional La Nueva España y muchas personas se interesaran por el futuro del animal.
La historia de Lazcano guarda cierto parecido con la de Truman, la ganadora del Goya a mejor película en la última edición. Intervenido quirúrgicamente la pasada semana, ha decidido declinar más tratamientos y, según ha explicado a La Nueva España, le quedan unas semanas de vida. Ya ha preparado su esquela y su funeral, pero necesitaba encontrar un hogar para Trasgu. Con el símil con Truman fue como José Ramón Silveira, fotógrafo de La Nueva España, contó la situación de Lazcano a su compañera, la periodista Carmen M. Basteiro.
"Silveira conoce un montón de historias porque se para a hablar con todo el mundo", cuenta Basteiro por teléfono a Verne. "Hace unos días me dijo '¿conoces la película de Truman? Tenemos un caso igual: Josín'. Yo no me lo podía creer, Josín es superconocido en Mieres y todo el mundo lo aprecia un montón".
Basteiro afirma que su conversación con Lazcano, que visitó con Trasgu la redacción de La Nueva España, comenzó de la misma forma que arranca su texto: con el hombre diciendo "me muero". "Daba la sensación de que él, hablando de su muerte, estaba más cómodo, lo tenía más asumido, que nosotros", reconoce la periodista.
Tras publicar la historia de Lazcano y Trasgu, mucha gente comenzó a interesarse por ellos. "Nuestros compañeros de la web del diario trataron genial el tema y empezamos a recibir algunas llamadas telefónicas", cuenta Basteiro. "Así que Puse en contacto a Josín con personas que querían quedarse con el perro. Iba a tener incluso para elegir".
Una dueña a 35 km de Mieres
La elegida por Lazcano para quedarse con Trasgu no estaba, sin embargo, entre los contactos que Basteiro le hizo llegar. Su nombre es Antonia Morales, una vecina de Lugo de Llanera –a 35 km de Mieres– que, tras leer la historia del enfermo, decidió ir personalmente a buscarle.
"Leí la noticia el domingo y me dije: voy a coger yo al perro, porque ese hombre tiene que irse tranquilo", cuenta Morales por teléfono a Verne. "Así que, como en la noticia no aparecía forma de contacto, fui yo misma [a Mieres]".
Tras hablar con la policía y localizar el bar que aparecía en las fotos de La Nueva España, uno de los parroquianos la puso en contacto con Lazcano. "No fue muy difícil, en el pueblo parecía conocerlo todo el mundo", reconoce.
Morales no conocía a Lazcano hasta esa tarde, pero su historia le fascinó. "Josín es un personaje que no se merece todo lo que le ha pasado", cuenta. "Es un intelectual, un artista, y su historia es un claro ejemplo de cómo la vida da muchas vueltas, y nos puede pasar a cualquiera". Tras pasar la tarde juntos, Lazcano decidió que Trasgu sería para ella.
El 17 de octubre se reunieron de nuevo para que Lazcano le entregara al perro. "Lo organizamos como él quería", explica la mujer, madre de un niño de 6 años. Al encuentro acudió la Televisión del Principado de Asturias, que grabó estas imágenes:
"La despedida fue muy dura, pero [Lazcano] fue muy valiente", explica Morales un día después, ya con Trasgu "acostado en su camita", cerca de ella. "El perro va a estar de maravilla conmigo. Josín puede irse tranquilo".