Los Morancos son youtubers de éxito en España. Cada vez que muestran un contenido en la plataforma de vídeos, obtienen cientos de miles de reproducciones. Sus paródicos vídeos musicales comentan a menudo la actualidad política, pero también la vida cotidiana de los españoles. Coincidiendo con las fechas navideñas, el dúo de humoristas ha lanzado uno nuevo dedicado a las comidas de empresa. Ha alcanzado 330.000 visualizaciones en sus primeras 24 horas de publicación.
En el vídeo, César Cadaval interpreta a la figura del jefe de la oficina que hace las veces de anfitrión del encuentro navideño. Su hermano Jorge interpreta a una de las trabajadoras de la empresa, que narrra cantando los lugares comunes a los que muchos españoles se enfrentan en este tipo de citas.
El vídeo, rodado en un restaurante de Sevilla, comienza parodiando una de esas frases de escritores que tanto gustan en las redes sociales: "Ve reservando tu mesa pa' la comida de empresa", firmado por Paulo Cohelo Ahí.
El comienzo es tranquilito,
una cerveza, un vinito
mientras todo el mundo llega.
Pero como somos tantos,
a la hora de sentarnos
ya está media empresa ciega.
Esas cañas y copas mientras esperas a que llegue el resto de compañeros
El estribillo de la canción habla del puntito generado por el alcohol que hace que todos los compañeros se adoren, hasta que llega el típico discurso del jefe agradeciendo el esfuerzo del equipo y les corta el rollo. "El discurso del jefe todo los años igual", protesta Jorge Cadaval en una parte de la canción.
Después de comer, llega la barra libre.
Empiezo con un gin tonic
alternando tan tranquila.
Y al cabo de un par de horas
yo me convierto en Shakira.
La trabajadora a la que interpreta Jorge Cadaval levanta los brazos para mostrar pelo falso en las axilas. "Porque eso es África", canta César Cadaval en un momento del típico humor de Los Morancos.
El jefe de la empresa, que tal y como indica la canción se encarga de pagar la comida y la barra libre, termina saliendo a hombros del local.
El jefe, que paga la cena y la barra libre, sale a hombros