El Gobierno de Pedro Sánchez propondrá en sus Presupuestos para 2019 una subida de impuestos para las rentas superiores a los 130.000 euros al año: se trata de un incremento de dos puntos porcentuales en el IRPF y otros dos para el tramo que supere los 300.000 euros. En el ejemplo que puso María Jesús Montero, ministra de Hacienda, alguien que gane 200.000 euros pagará unos 1.100 euros más al año, siempre que se apruebe esta iniciativa acordada con Podemos.
La ministra apuntó que esta medida se dirigía a "las grandes rentas", pero no todo el mundo estaba de acuerdo. Para el PP, el incremento de impuestos a personas y empresas puede tener consecuencias negativas para la contratación y la inversión. Albert Rivera, líder de Ciudadanos, aseguró que afectaría “a la clase media trabajadora”, en un tuit muy debatido que suma más de 2.000 comentarios. Entre ellos, muchos usuarios critican que equipare clase media con las rentas superiores a los 130.000 euros anuales. Desde el equipo de Rivera matizan que el líder de Ciudadanos se refería en su tuit a los autónomos y a la subida de la fiscalidad del diésel. Pero, ¿cómo es la clase media en España?
¿Cuánto hay que cobrar para ser clase media?
Si tenemos en cuenta solo la economía, la clase media sería la que ingresa entre el 75% y el 200% de las rentas medianas, según explica a Verne Luis Ayala, catedrático de Economía de la Universidad Rey Juan Carlos. Se trata, como apunta, de una definición que cuenta con bastante consenso entre los economistas.
Según los datos estadísticos de la Agencia Tributaria y tal y como apunta este economista, la renta media en España estaría en torno a los 20.000 euros al año, por lo que la clase media tendría unos ingresos de entre 15.000 y 40.000 euros al año, muy lejos de los 130.000 que mencionaba Rivera.
Ayala advierte de que sería más adecuado hacer este cálculo con las rentas medianas, es decir, el valor que estaría justo en la mitad tras ordenar todas las rentas de la más baja a la más alta. El valor medio es más susceptible de verse distorsionado por datos anormalmente elevados o bajos, pero sirve de orientación. La encuesta de condiciones de vida del INE da un valor mediano de ingresos inferior, 14.203,30 euros, pero Ayala recuerda que la cifra de la Agencia Tributaria puede ser más práctica si hablamos de subida de impuestos.
Otro dato a tener en cuenta: según el Instituto Nacional de Estadística (INE), una característica de la distribución salarial española es que "figuran muchos más trabajadores en los valores bajos que en los sueldos más elevados". De hecho y según explicaba EL PAÍS, solo el 0,5% de los contribuyentes declaran ganar más de 130.000 euros al año. El 96% ingresa menos de 60.000 euros y el 85%, menos de 30.000.
¿Solo cuentan los ingresos?
La definición de clase media no es únicamente económica. Como explica Carlos Peláez, antropólogo y profesor de la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid, el concepto es más amplio y contempla aspectos sociales, incluyendo “cierto prestigio y estatus social”.
Por ejemplo, se considera clase media a “aquellos que se dedican a profesiones intelectuales más que manuales y que tienen una red de contactos con cierta influencia”. Y añade: “Aunque el dueño de un restaurante pueda ganar más al mes que un abogado, es el abogado el que se considera clase media”. Se trata de "profesionales y técnicos", añade Juan Jesús Rodríguez, catedrático de Estructura Social en la UNED, que aclara que estos trabajadores “ni siquiera sueñan con ganar” los 130.000 euros anuales, “renta más propia propia de ejecutivos y directivos”.
Aunque el concepto no sea solo económico, Peláez es tajante: "No hay ninguna definición de clase media que contemple el perfil al que se refiere Albert Rivera".
¿Cuántas personas de clase media hay en España?
Según un estudio del propio Ayala para la Fundación Alternativas, uno de cada seis hogares de la clase media pasó al grupo de rentas bajas durante la crisis. Actualmente y según los ingresos, la clase media supone menos del 60% de la población española, frente al 70% de los países nórdicos. Solo Estados Unidos tiene un porcentaje menor de clase media que España entre los países desarrollados.
Peláez añade que “el modo de vida de la clase media se ha precarizado”. Cada vez se gasta menos en restaurantes, vacaciones y cultura “para destinarlo más a luz, gas, comida y otros bienes de primera necesidad".
Ayala recuerda que las clases altas, el 10% más rico, “prácticamente no se vio afectado por la crisis”. Peláez coincide: la crisis no afectó tanto a quienes tenían ingresos elevados como “a las clases trabajadoras y a los inmigrantes, que sí se enfrentan a la pobreza severa y en la que sí hay una mayor incidencia en pobreza infantil”.
¿Cada vez es más difícil acceder a la clase media?
No solo hay menos personas en la clase media, sino que además su edad se ha incrementado en los últimos años, dice Ayala. A alguien que sale de la universidad y comienza a trabajar le cuesta más llegar a esta posición que hace unas décadas.
Las dos principales barreras de acceso son las menores prestaciones sociales que hay en España (y que se financian con impuestos) y el mercado de trabajo. En especial, la posibilidad de contar con contratos estables. "Hace dos o tres décadas, la clase media se definía, entre otras cosas, por el acceso a bienes de consumo, como los electrodomésticos. Ahora se define más por cómo accede al mercado de trabajo", y si cuenta con contratos indefinidos o temporales, explica Ayala.
De hecho, en 2017, uno de cada cuatro españoles se encontraba en riesgo de pobreza o exclusión social. Son 12,4 millones de personas, 1,4 millones más que en 2008, según un estudio de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social en el Estado Español. Este riesgo no depende solo de los ingresos y de los recursos materiales, sino también del acceso a un empleo seguro.