Intelectuales, políticos y artistas han defendido una mayor integración política entre España y Portugal a lo largo de la historia. Lo han hecho referentes españoles como Miguel de Unamuno y también portugueses, como José Saramago. El tema ha vuelto a la actualidad después de que el acalde de Oporto pusiese la idea sobre la mesa en una entrevista concedida a la agencia Efe. “Hablamos un idioma que no es el mismo, pero que lo entendemos; tenemos un espacio iberoamericano que es esencial para ambos países; falta hacer el trabajo de construir el Iberolux”, dijo Rui Moreira en la entrevista publicada el 4 de febrero.
El concepto “Iberolux” es una adaptación de Benelux, la unión aduanera y económica que asocia a Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo desde 1948. La idea de Iberolux llevada al extremo significaría formar un Estado ibérico. Es una idea utópica que integraría a portugueses y españoles, con sus diferencias y similitudes, bajo un mismo marco político. ¿Y hay más rasgos que nos unen o que nos separan? Hemos hecho esa pregunta a varios españoles que viven en Portugal y a portugueses que viven en España. “Somos parecidos, pero diferentes”, es una respuesta repetida por varios de ellos, a un lado y al otro de la frontera. Estas son las principales diferencias y similitudes que aprecian.
Francisco Fernández, 28 años. Vive en Aveiro (75 kilómetros al sur de Oporto) y es de Madrid. Trabaja como analista de datos de fútbol.
Qué nos une: "Como en España, el reguetón está muy de moda. Ha tardado en entrar, pero ahora lo escuchas en muchísimos bares y discotecas”.
Qué nos separa: "Muchos portugueses me han dicho que admiran lo involucrados que estamos los españoles en política. En España hay más manifestaciones que en Portugal. Somos más reivindicativos que ellos”.
Laureana Geraldes, 33 años. Vive en Madrid y es de Penamacor (a 15 kilómetros de la provincia de Cáceres). Es cantante de fado, el estilo musical portugués.
Qué nos une: "Nos parecemos en lo mucho que nos gusta el sol y comer fuera".
Qué nos separa: "Los españoles os arregláis más para salir. También os maquilláis más. Cuando voy a una boda en España alucino con los vestidos que veo. Además, sois mucho más bruscos, tanto en las relaciones sociales como en las laborales. Os decís las cosas en el trabajo sin ningún tipo de formalismo. Por ejemplo: nosotros no mandamos un correo de una sola línea para enviar un archivo. Todo se hace con más educación”.
Ángela Olea, 30 años. Vive en Oporto y es de Madrid. Trabaja como bloguera.
Qué nos une: "Los portugueses son gente muy amable, siempre dispuestos a echar una mano. Creo que esa es una de las grandes cosas que tenemos en común. En ningún momento me he sentido fuera de lugar en Portugal. Son muy acogedores".
Qué nos separa: "Los portugueses son más serios que los españoles, pero no en el mal sentido de la palabra. Quizá sea más acertado decir que son correctos o discretos. Probablemente los españoles en general somos más desenfadados. En general, los portugueses hablan inglés mucho mejor que nosotros, y esa es una de las cosas que más me sorprendió cuando llegué aquí. Supongo que uno de los motivos principales es que no doblan las películas y series extranjeras, sino que les ponen subtítulos. Sería maravilloso poder adoptar esto en España. Y son, como en el resto de Europa, de comer y de cenar muy pronto [en torno a las 13.00 y las 19.00]".
João Esteves, 41 años. Vive en Bilbao y es de Queluz (cerca de Lisboa). Trabaja en una pastelería portuguesa.
Qué nos une: "A la hora de dejar propina somos muy parecidos. Si el servicio ha sido bueno, recompensamos al camarero. Es muy similar".
Qué nos separa: "En Portugal nadie entra en un comercio y pide algo sin dar los buenos días. En mi negocio lo veo. La gente entra y te pide un café con leche sin mirarte a la cara. Me parece curioso que en España no os molestéis cuando no os den los buenos días. Yo ya me he acostumbrado. Por otro lado, el español sabe mucho menos sobre Portugal que el portugués sobre España. Es algo a lo que llamo síndrome del país grande. Además, los españoles sois muy ruidosos. Puedes reconocer a un grupo de españoles desde lejos solo por los gritos que escuchas. Y mira que yo vivo en Bilbao, donde son mucho menos escandalosos que en otros sitios. Pero, igualmente, un vasco es más ruidoso que cualquier portugués”.
Flor Navarro, 37 años. Vive en Lisboa y es de Villena (Alicante). Trabaja como guía turística.
Qué nos une: "Yo siempre digo que somos como primos hermanos. Creo que hay muchas más cosas que nos unen que motivos que nos separan... Aunque se dice lo contrario, los portugueses no odian a los españoles. Nos une el cariño que nos tenemos, a pesar de que desde España siempre les hemos mirado por encima del hombro”.
Qué nos separa: “En Portugal son menos extrovertidos que nosotros, no muestran tanto sus sentimientos. Tratan mucho de usted. La gente es un poco más melancólica (esa famosa saudade que tan bien los define) y tal vez, un poco más tradicionales. Con todo el movimiento feminista que hay en España diría que aquí todavía están un poco dormidos, y en general, hay más machismo”.
Rafa Abrantes, 33 años. Vive en Madrid y es de Coímbra (a medio camino entre Lisboa y Oporto). Trabaja como ingeniero.
Qué nos une: “Como en España, si sales hasta que cierran los bares en Portugal, te quedas hasta las 6.00. En los dos países nos gusta mucho salir de fiesta”.
Qué nos separa: "Los españoles no tenéis problema en estar de pie cuando salís a tomar algo. A los portugueses nos cuesta más. Eso de estar tanto rato de pie se me hace raro. También creo que los portugueses somos menos optimistas que los españoles. Vosotros sois más positivos. Veis la botella medio llena y nosotros, medio vacía".
Inés Cruz, 35 años. Vive en Lisboa y es de A Coruña. Trabaja como guía turística.
Qué nos une: "La comida es muy parecida. Creo que la mayor parte de los platos portugueses pueden pasar por españoles. Hay diferencias entre el norte y el sur de Portugal, como en España, pero la línea gastronómica es muy similar. Además, en los dos países nos gusta muchísimo comer".
Qué nos separa: "Los portugueses se toman la vida con más calma que los españoles. Es una de las cosas que más me llamó la atención al empezar a vivir aquí. No se toman un café en cinco minutos, como en España. Si metes prisa en una cola o al camarero, es posible que te pongan mala cara. Todo es más tranquilo. A veces me desespera lo despacio que transcurre la vida aquí. Además, hay menos contacto físico que en España. Nosotros nos damos dos besos para presentarnos, ellos no. A mis compañeros de trabajo les costó acostumbrarse a que les diera dos besos cada vez que les veía”.
Antonio Marquês, 54 años. Vive en Tres Cantos (Madrid) y es de Lisboa. Trabaja en un banco.
Qué nos une: “Somos muy parecidos en nuestro amor por el fútbol. En parte, los equipos me recuerdan a los de España. Por un lado tienes al gran equipo de la capital, el Benfica de Lisboa, equivalente al Real Madrid, y al vecino, el Sporting de Lisboa, que me recuerda al Atlético. Y en contraposición, un club con un carácter más regionalista, el Oporto, como el Barcelona”.
Qué nos separa: "Los españoles son más puntuales que los portugueses. Lo he notado bastante en el trabajo: en Portugal he visto a más personas que entran tarde que en España. Creo que los portugueses conducimos bastante más rápido. Quizá seamos un poco más imprudentes que los españoles. Y respetamos menos los pasos de peatones que los españoles".