El ‘vocho’: el auto que cautivó el corazón de los mexicanos

Se dejó de producir en 2003 y se vendieron más de 1,6 millones de unidades en 50 años

Daniel Sangeado adquirió su primer Vocho en 1993 y el segundo en 2001. Aunque el nombre oficial de este auto es Volkswagen Sedán, este modelo de auto tiene múltiples nombres: en México es popular Vocho, en Estados Unidos es Beetle y en España, Escarabajo, mientras que en Brasil se le conoció como Fusca.

Foto: Volkswagen de México.

“He vivido muy buenas historias con él”, relata Sangeado a Verne. “Su funcionalidad, la posibilidad de conservarlo y mantenerlo en buenas condiciones es lo que más me gusta”, dice el propietario de este sedán desde hace casi dos décadas. los mexicanos que vivieron en los años noventa, pueden recordar que los taxis ecológicos iban pintados de verde, y los otros, de amarillo. Era el modelo de auto que se podía observar en ciudades como Guadalajara o Monterrey, pero también en caminos empedrados en otros Estados de México.

Un auto particular y un taxi, ambos 'vochos', en una fotografía de 2002. Cuartoscuro

Vocho, según el diario especializado Motorpasión, viene de la costumbre mexicana de realizar diminutivos a los nombres, por lo que es una del nombre Volskwagen a Vocho. El sedán, construido por la automotriz alemana Volkswagen, fue todo un éxito desde su fabricación en 1934, donde "el reto era construir un vehículo económico pero seguro para el pueblo alemán", según relata su oficina de comunicación. En México, este vehículo vendió 1,6 millones de unidades entre 1954 y 2003, cuando la empresa decidió dejar de producir este vehículo (en 2019, el auto más vendido fue por 40.000 unidades y fue en solo su primer año).

Una exposición de 'Vochos' en Monterrey (Nuevo León) poco después de que se dejara de producir en México, en 2005. Cuartoscuro

El 22 de junio se celebra el Día Mundial del Vocho, una celebración que surgió en 1995, a partir de reuniones organizadas por los fanáticos del escarabajo, que en otros países de Latinoamérica fue nombrado como Pichirilo o Pulga, por su aspecto redondeado similar al de un insecto.

En México, los vochos son catalogados como autos antiguos. Algunos lucen el paso del tiempo y otros son auténticas piezas de colección que se pueden vender por varios miles de pesos. En el mercado oscilan entre los 3.000 y 25.000 pesos (entre 130 y 1.100 dólares, aproximadamente), pero se pueden encontrar ejemplares en subasta por 180.000 pesos (casi 8.000 dólares). Pero en el país estos vehículos guardan, más que un valor económico, una estimación personal por las historias que se han vivido recorriendo caminos en ellos.