El próximo 2021 la película Space Jam cumplirá 25 años y, coincidiendo con el aniversario, verá la luz su segunda parte: Space Jam 2: A New Legacy. LeBron James, alero de Los Ángeles Lakers y protagonista de la nueva entrega, ha publicado este 18 de agosto un vídeo donde, por primera vez, puede verse cómo será la nueva equipación del conjunto de los Looney Tunes. En el largometraje original, Michael Jordan era la estrella que tenía que ayudar a estos dibujos animados a ganar un partido crucial. Si perdían, se convertirían en una atracción más de un parque temático extraterrestre. Aunque Jordan aparece acompañado de Bugs Bunny, Piolín y compañía durante toda la película, tras las cámaras la situación era bien distinta: durante buena parte del rodaje, la única compañía del jugador de los Chicago Bulls eran personas vestidas de verde.
En la película original, Michael Jordan (y otros actores como Bill Murray) compartían su mundo real con el animado de los Looney Tunes. Aunque en pantalla se viera cómo ambos mundos convivían, el jugador de baloncesto solía estar solo detrás de las cámaras. Las imágenes del making of (cómo se hizo) en las que se ve al exjugador de los Chicago Bulls enfrentarse a especialistas vestidos de verde, para ser eliminados del plano después en posproducción, son muy populares en redes sociales, donde suelen popularizarse cada cierto tiempo.
En el making of de Space Jam, que puede verse al completo en YouTube, se revelan las claves que ayudaron al largometraje a tomar forma. La primera parte del proceso, y según relata uno de los animadores en el vídeo, comienza con “un cacho de papel, un lápiz y unos dibujos”.
En esta parte del desarrollo, los animadores comienzan dibujando a mano el storyboard o guion visual, que consiste en un conjunto de animaciones ordenadas según las secuencias para servir de guía antes de que la película se realice. Así, se trazaron a mano los dibujos animados que darían forma a los Looney Tunes, incluidos sus movimientos, reacciones y posiciones. Después de esta primera aproximación, el siguiente paso consistía en grabar las escenas de Michael Jordan que posteriormente se incorporarían a la película.
Además de la información que aparece el making of, en la página oficial de la película se explica detalladamente este proceso. La web de Space Jam, creada en 1996 y que mantiene una estética muy característica de la época, cuenta que en esta parte el jugador solo veía un “mar verde”. Las escenas se grabaron en un amplio estudio forrado en verde (con puntos rojos que servían como referencia para marcar las distancia) para que luego este fondo, llamado croma, pudiera sustituirse por dibujos animados en la posproducción.
Los creadores querían lograr el máximo realismo posible y, para tratar de conseguirlo, desarrollaron técnicas que permitieran captar los movimientos de la manera más natural posible. Por ello, y mientras Jordan grababa en ese gran estudio verde, había junto a él otros actores vestidos enteros de verde que le servían de referencia. Ed Jones, director ejecutivo de Cinesite (una de las empresas encargadas de la animación del largometraje), lo explicaba así en el vídeo del making of: “Queríamos grabar de una manera muy libre y captar de una manera muy espontánea la manera que tiene de jugar al baloncesto”.
Mientras se grababan estas escenas, los animadores aprovechaban para tomar fotos de los movimientos de Jordan. Estas les servían de referencia para incluir el dibujo del jugador en el storyboard, y así hacerse una perspectiva de cómo quedaría el resultado final. Posteriormente, estos trazos se escaneaban y pasaban a ordenador. En el vídeo se explica además que para hacer el estadio se tomaron referencias de uno real, y en la web se detalla que el público era una mezcla entre dibujos duplicados y personas grabadas en la vida real con “disfraces extraños”, que posteriormente eran manipuladas por ordenador.
La parte final de este gran proyecto consistió en combinar lo grabado en la vida real con los dibujos de los personajes animados. Esto fue posible gracias al empleo de programas de animación a través del ordenador. Además, también fue clave el uso de una cámara que permitía sacar retratos 3D de los actores, para así poder captar mejor sus movimientos. Según explicaba Michael Jordan en el making of, "mucha de la tecnología usada en la película es simplemente increíble. Si ellos han podido hacer que yo salga bien, pueden hacer que cualquiera salga bien también”.