Este martes hemos visto a Uma Thurman, mmmmm, distinta. Una fotografía de la actriz ha desatado el debate sobre si se ha operado, ha envejecido, se ha puesto pómulos, ha dejado de maquillarse, se ha depilado las cejas de otra manera, se le ha olvidado el rimmel, se ha puesto botox, se ha lavado el pelo, se ha estirado los ojos o, simplemente, si está igual que antes. Realmente nadie ha hablado con ella ni con los supuestos médicos de su supuesta operación estética. Y de todas formas ¿qué más nos da? ¿no es injusto someterla a un juicio público así sea cual haya sido su decisión, como dice S Moda? En cualquier caso Twitter nos ha recordado que cuánto nos gusta hablar de los demás.
Rescatando un chiste que ya se puso de moda cuando aparecieron unas imágenes de Renée Zellweger, el "Madre mía Uma Thurman" ha sido la coletilla del día en la red acompañado de fotografías que no son Uma Thurman sino otros famosos o de simples objetos, reduciendo el debate al absurdo. Es decir, la broma ya no es Uma Thurman, sino las bromas críticas sobre las bromas de Uma Thurman. La actriz se ha convertido en trending topic en España. Madre mía, Twitter.