A todo nos ha afectado de forma directa o indirecta la época de crisis. Existe el anhelo de otros tiempos mejores y el esfuerzo por ponerle fecha final en el calendario. Pero la realidad es que siempre hay familias en crisis económica. Familias que no sólo no se pueden ir de vacaciones a otro lugar, o comer marisco fresco en Nochebuena. En estas fechas, para muchos el problema está en que Papá Noel o los Reyes Magos no pueden hacerse cargo de todos los regalos que piden los niños.
Estos son algunos consejos que pueden seguir los padres y madres para enfrentar estos días, si Papá Noel o los Reyes no pueden traer muchos regalos. O si no traen los que los pequeños han pedido.
1. Conciencia a tus hijos y enséñales a valorar lo que tienen. Nacer en la familia y en el lugar que han nacido ha facilitado su vida. Todo el año -pero en especial en estas fechas- recicla juguetes para organizaciones que se dedican a que ningún niño se quede sin juguete.
2. Cuando escriban su carta, inculca que escriban para los niños que no tienen las mismas posibilidades, así fomentas la empatía. Dar la espalda a la realidad de otras personas o quitarse responsabilidad no es la mejor opción ni como adulto ni como niño.
3. Limita el número de regalos que pueden pedir y guíalos según sus necesidades y edades. Y que no solo sean juguetes. Hoy en día los niños no esperan 365 días para tener un juguete como antes.
4. Si no van a poder tener lo que han pedido, educa en la idea de que los regalos son sorpresa y que son afortunados por lo que les traigan.
5. También se puede regalar experiencias, juegos y tiempo en común. Porque en el fondo es lo que quieren los niños, pasar tiempo con los suyos. Explícales desde pequeños que no todo es material. Pon de moda el “Vale por…” (acompañarte más a tus competiciones, llegar antes a casa para cenar juntos, jugar juntos, ir en bici, cocinar juntos, hacer manualidades un sábado…).
6. Educa en la idea de que la fábrica de juguetes no es infinita y que, si piden mucho, otros niños pueden quedarse sin nada. Así fomentas compartir con otros niños.
7. Enséñales a hacer balance de su año, sus esfuerzos, sus logros y sus otros deseos para ayudarles a proyectarse.
8. Si económicamente no es posible tener muchos regalos, así hay que transmitirlo. No caigas en el argumento de “mis amigos lo tienen”. Es mejor educar en compartir y no en la propiedad exclusiva.
9. Llévalos a los centros donde reciben juguetes para otros niños y que lo vean de primera mano y no solo por los medios de comunicación. Que sean ellos quienes llevan juguetes que ya no usan por diferentes motivos.
10. No te excedas en los regalos ni proyectes deseos pasados de tu infancia.
No nos perdamos en la Navidad. Enseñar a vivirla con sentido es una de las misiones de los padres y madres. Vive, transmite y desea una Navidad con valores.
Yolanda Cuevas Ayneto es psicóloga de la salud y el deporte y articulista sobre temas infantiles.