El vídeo que muestra el apoyo a una madre insultada por dar el pecho en público

'Eres repugnante', le dijo un cliente. Ella se quejó y el resto de personas acudieron en su ayuda

Jessie Maher se encontraba el pasado lunes dando el pecho a su hija en la cafetería de un centro comercial de Connecticut (Estados Unidos). Al presenciar la escena, un hombre comenzó a gritar y a insultarla, diciendo que lo que estaba haciendo era "repugnante". Ella decidió registrarlo en vídeo. Lo publicó ese mismo día en su perfil de Facebook y, desde entonces, ha superado los 6,6 millones de reproducciones. En la grabación también puede verse cómo el resto de personas presentes en la tienda se enfrentan al agresor.

"¿Alguien conoce a este imbécil que me atacó verbalmente esta mañana mientras estaba amamantando a mi bebé?", dice Maher en el post que acompaña al vídeo, en el que se le escucha cada vez más nerviosa. "Antes de empezar a grabar, él me miró y me dijo muy enfadado: '¿Puedes hacer eso en otro sitio? Es repugnante y tú eres asquerosa'. Dijo otras cosas murmurando y yo le contesté: 'Estoy alimentando a mi hija y tengo el derecho a hacerlo aquí, vete y déjame en paz'. Él respondió (mientras se acercaba y alzaba la voz): 'Eres repugnante, eres repugnante, eres repugnante, puta'. Dijo muchas más barbaridades que ya no recuerdo. A esas alturas TODO EL MUNDO salió en mi defensa. Los trabajadores del lugar y los compradores. Entonces comencé a grabar...".

En el vídeo, la madre comenta: "Ese hombre se ha vuelto loco porque estoy amamantando a mi hija y estoy temblando". Cuando agradece el gesto de protección a los presentes, una mujer le dice que no tiene por qué temblar y que ese hombre no tiene derecho a hacer lo que ha hecho. "No debes sentirte avergonzada por alimentar a tu bebé. Es él quien tiene que marcharse si no le gusta", le dicen las mujeres que se acercan a su lado para tranquilizarla.

La lactancia materna en público genera un debate que nos ha dejado multitud de artículos virales. En este caso, la publicación se ha compartido más de 78.000 veces y Maher ha recibido cientos de muestras de apoyo. En otros post de su perfil, la estadounidense agradece el apoyo mostrado en redes sociales y pide que los usuarios no hagan conjeturas en público sobre la identidad del agresor, ya que ha comprobado que muchos de ellos estaban equivocados.

"Algunas madres se han abierto y me han contado sus experiencias", explica la mujer en Facebook. "Me hablan de cuando sus bebés lloran en público y tienen que esconderse en un baño o bajo una manta o pasar calor en un coche por miedo a las reacciones de otros, desde una mirada desagradable a una situación tan incómoda como la que viví ayer. Yo he decidido no esconderme mientras doy el pecho a mi hija. Ser madre ya es lo bastante duro. (...) Seamos amables y educados. Enseñemos a nuevas madres que tienen derechos y normalicemos el hecho de amamantar a nuestros hijos", comenta.