Hay cumbias dedicadas a los rompecorazones, las madres, los narcos y hasta a Goku. Renee Goust, una cantante mexicoamericana de 29 años, ha compuesto una sobre una palabra o, más bien, para protestar en contra del uso que se hace de un término: feminazi.
"Qué poca sensibilidad hay que tener para tomar algo tan cruel, tan históricamente hiriente y pretender usarlo para imponerse. Ya mero le atinaste, casi, al apodarme feminazi, pero un detalle te falló: la que camina por las calles con miedo soy yo", es parte de la letra de la Cumbia Feminazi. El vídeo de la canción publicado en la cuenta de Facebook de Goust el 27 de julio registra más de 60.000 reproducciones en tres días.
La compositora, residente de Brooklyn, cuenta a Verne que ha escuchado muchas veces esa palabra en conversaciones, especialmente en redes sociales. "Al comentar algo tan sencillo como que las mujeres merecemos respeto, rápidamente surge la palabra feminazi en los comentarios y frases como, Odio a las feminazis, siempre tienen que llegar con sus ideas radicales", comenta vía telefónica. "Lo que no entienden es que yo no quiero quitarles derechos a ellos, al contrario, creo que el feminismo podría ser enriquecedor en todas las culturas, especialmente en México. Pero la palabra feminazi la escucho constantemente y a veces de gente altamente educada, con maestrías y doctorados. Y no soy la única".
Para componer su cumbia, Goust investigó el origen del término. Según el diccionario Merriam-Webster, los primeros usos de la palabra se registran en 1989, pero no se le atribuye un autor. En su web, la organización de análisis de medios Media Matters, explica que el término fue popularizado por el comentarista estadounidense ultraconservador Rush Limbaugh a inicios de los noventa. En su libro, The Way Things Ought to Be (Las cosas como deben ser) de 1992 escribió: "Prefiero llamar a las feministas más odiosas por lo que realmente son: unas feminazis...utilizo la palabra seguido para describir a las mujeres que perpetúan este holocausto moderno: el aborto".
Al respecto, Goust comenta: "Este locutor de radio utilizaba la palabra para insultar a las mujeres que peleaban por sus derechos reproductivos. Creo que poco a poco hemos ido progresando, pero desgraciadamente la gente sigue diciendo feminazi, sin ni siquiera entender el contexto en el que se originó la palabra". Para la cantante, este no es solo un insulto para las mujeres. "He conocido a muchos judíos y creo que es una palabra muy ofensiva para ellos también. Conozco a algunos que perdieron a sus padres, hermanos y otros familiares en el Holocausto, y creo que es terrible que se use el término nazi a la ligera. Por eso me nació hacer una canción al respecto".
La música, graduada de la Universidad de Guadalajara, dice que ha recibido insultos en las redes a raíz de la canción. "Me han llamado machorra, zorra y he recibido amenazas. Creo que esa es la razón por la que muchas mujeres dicen que no son feministas o no defienden sus ideas, porque tienen miedo a recibir estos insultos o a quedar mal con los hombres que tienen estas ideas". Sin embargo, asegura que ha recibido más respuestas positivas que negativas. "Estoy muy contenta porque me ha escrito gente de México, España, Colombia agradeciéndome por la canción. No solo mujeres, también hombres me escriben para decirme que me apoyan y apoyan la causa. Me da gusto que exista más entusiasmo que agresión".
Goust tiene planes de producir una versión de la canción con una banda y más instrumentación. "No quería hacer algo tan serio o tan pesado, por eso opté por componer una cumbia, quiero que la gente la baile", comenta. "Antes hacía mucho rock y ahora estoy entrando en los géneros latinos, como la cumbia y el huapango", dice la compositora que creció tanto en Arizona como en Sonora. A principios del 2017, Goust planea lanzar un EP (extended play o álbum corto) que recopilará algunas de sus canciones, incluida la Cumbia Feminazi.