La noticia de la muerte de Miliki se compartió la noche del jueves en redes sociales, hasta el punto de que el viernes por la mañana se había colado entre los cinco temas más leídos de EL PAÍS. Y eso a pesar de que este queridísimo payaso falleció en noviembre de 2012.
No es la primera vez que ocurre algo parecido: en octubre del año pasado, esta noticia también se compartió y llegó a ser uno de los temas más leídos del diario, de nuevo sin que hubiera una explicación clara.
El periódico no ha recuperado el tema, como hace a menudo con noticias que se publica en redes usando la etiqueta #hemeroteca. Tampoco se trata del aniversario del fallecimiento del payaso, aunque en esta ocasión la fecha se acerca más (es el 18 de noviembre). Según explica Guillermo Castellanos, responsable de Analítica Web de EL PAÍS, la noticia ya empezó a moverse el 31 de octubre, aunque hasta el jueves no llegó a estos niveles tan sorprendentes.
Este tráfico tiene la mayor parte de su origen en Facebook: esta red social no permite buscar publicaciones concretas, pero la noche del jueves había 90.000 personas usando el nombre de Miliki en sus publicaciones, 90.000 buscando este nombre y otros 86.000 buscando a Milikito (que es su hijo Emilio Aragón y que sigue vivo). Lo que no podemos decir es si en origen se trataba de un despiste, una broma o de una simple publicación nostálgica que en algún momento comenzó a malinterpretarse. A diferencia del año pasado, cuando gran parte del tráfico vino de Latinoamérica, la noticia se ha compartido sobre todo en España.
Habiendo comenzado en Halloween, no podemos descartar la influencia de los llamados "payasos diabólicos" de los que se ha hablado tanto, aunque es imposible decir en qué sentido y hasta qué punto. Además, se ha publicado estos días la noticia de la muerte del payaso ruso Oleg Popov, lo que podría haber influido en las búsquedas de información en Google.
El tema también llegó a Twitter: la mañana del viernes aún había gente compartiendo el artículo de EL PAÍS. Eso sí, en esta ocasión, Miliki no se colocó entre las tendencias, según Trendinalia, web que recoge los temas más comentados en esta red social.
El efecto Lázaro y las noticias que vuelven a circular
No es la primera vez que una noticia se recupera como si fuera actual sin que haya motivos claros, en lo que la periodista Delia Rodríguez bautizó como el efecto Lázaro. Por ejemplo, en junio de 2015 la noticia de la dimisión de Esperanza Aguirre llegó a ser la más leída, a pesar de que era de septiembre de 2012. En este caso influyeron los rumores de que Aguirre podría abandonar la política.
Como explicaba Rodríguez en su artículo, en la posibilidad de que una noticia vuelva a difundirse de este modo influye “la intensidad y el tipo de emoción” que provoca en el lector. Los artículos que más se comparten tienen un alto contenido emotivo, ya sea positivo (la sorpresa y la utilidad) como negativo (la rabia y la indignación). Una historia “es capaz de provocar la misma emoción durante años”.
Así, no es extraño que el fallecimiento de Miliki se haya compartido en dos ocasiones en un año. Miliki es un personaje muy querido al que muchos asociamos con nuestra niñez, una época por lo general feliz y que recordamos con nostalgia.
Además de esto, hay un factor más prosaico: cuando se comparte una noticia, la fecha de publicación del artículo no se ve en redes. Y, por supuesto, bastantes han compartido el tema para avisar de que se trataba de una noticia antigua, pero de esta forma también han contribuido de esta forma a su difusión.
Es cierto que cuando Miliki falleció en 2012, su esquela, en la que se rogaba "una sonrisa por su alma", ya fue viral. Y también es cierto que en 2015 ya volvió a compartirse esta noticia antigua. Pero seguimos teniendo muy mala memoria, por lo que no es extraño que muchos hayan compartido el artículo, llevados por la emoción y el respeto, y sin llegar fijarse en que se trataba de una noticia de hace cuatro años.