El 2 de mayo se conmemora una batalla importante. No me refiero al levantamiento en Madrid contra los franceses ni a la tirantez entre Soraya Sáenz de Santamaría y Dolores de Cospedal. Eso es una minucia al lado de la Batalla de Hogwarts, narrada en el séptimo libro de las novelas de Harry Potter, de J. K. Rowling. En esta contienda murieron 55 personas, entre estudiantes, mortífagos, aurores y profesores.
Para conmemorar estos terribles hechos, la novelista lleva cuatro años pidiendo perdón públicamente en Twitter por haber terminado con la vida de alguno de sus personajes. En el tuit más reciente, publicado este miércoles, se disculpaba (ojo, que ya vienen los spoilers)“por matar a alguien que no murió durante la Batalla de Hogwarts, pero que dio su vida para salvar a las personas que la ganaron. Me refiero, por supuesto, a Dobby, el elfo doméstico”.
Se trata de uno de los personajes más queridos de la saga, por lo que no es de extrañar que el mensaje de Rowling se haya compartido 86.000 veces en menos de un día, sumando casi 6.000 comentarios.
Al principio no me gustaba Dobby, pero desearía ser más como Dobby, su muerte en el libro y en la película siempre me hace llorar.
Era tan inocente… Lo único que quería era salvar a Harry Potter y le recompensaste matándolo… ¿POR QUÉ, JO? ¿POR QUÉ?
¿Por qué mueren los mejores? Cuando estás en un jardín, ¿qué flores escoges? Las más hermosas.
La tradición comenzó en 2015, con la muerte de Fred Weasley: “Siendo mucho lo de Fred. *Agacha la cabeza aceptando vuestra ira razonable*”. A la pregunta de otro tuitero, Rowling explicó que había pensado “que podría pedir perdón por una muerte cada aniversario. La de Fred fue la peor para mí, así que he comenzado por él”. Fred era uno de los hermanos de Ron Weasley, uno de los tres protagonistas de la saga.
En 2016 le tocó el turno a Remus Lupin, amigo del padre de Harry Potter y profesor del colegio: “Una vez más, es el aniversario de la Batalla de Hogwarts así que, como prometí, me disculparé por una muerte. Este año: Remus Lupin”. En otros dos tuits añadió que “Arthur vivió, así que Lupin debía morir. Lo siento. No lo pasé bien. La única vez que mi editor me vio llorar fue acerca del destino de Teddy”. Y: “Para ser sincera, también me gustaría confesar que no decidí matar a Lupin hasta que escribí La orden del Fénix”.
En 2017 hubo polémica, ya que se disculpó por la muerte de Severus Snape, que para algunos lectores de la saga era un personaje interesante y lleno de matices, mientras que para otros era una persona más bien tirando a desagradable. Rowling ya apuntaba en su tuit que la disculpa sería controvertida: "Vale, allá va. Por favor, no comencéis a discutir por esto, pero este año quería disculparme por matar (susurra)... a Snape. * Corre a refugiarse *".