Los políticos españoles llevan días apuntándose unos a otros con el dedo y revisando sus expedientes académicos. En especial, desde que la exministra de Sanidad Carmen Montón dimitiera el martes 11 de septiembre por las irregularidades de su máster y las acusaciones de plagio en su tesis. Desde entonces, ha resucitado la polémica en torno al máster Pablo Casado, Twitter ha repasado el currículum de Albert Rivera y Pedro Sánchez ha amenazado con acciones legales a quienes le acusan de plagiar su tesis.
El escritor y semiólogo italiano Umberto Eco publicó en los años 70 en Italia Cómo hacer una tesis. Se trata de una guía creada mucho antes de internet y de las tentaciones de la Wikipedia, pero que se mantiene en su mayor parte vigente en el siglo XXI y, por tanto, sería muy útil para políticos en apuros.
Desde el principio, Eco deja claro que su libro no está pensado para los que buscan "instrucciones sobre cómo hacer una tesis en un mes". Para ellos, el italiano da un par de consejos lleno de sarcasmo: "Invertir una suma razonable para encargar la tesis a otra persona o copiar una tesis ya hecha unos años antes en otra universidad, lo que supone una inteligente labor de investigación".
Una vez pasado el filtro, el autor enumera un puñado de consejos sobre cómo lidiar con este trance académico. Piensa en estudiantes que quieran ser rigurosos, aunque no tengan todo el tiempo del mundo ni todos los medios deseados, y explica la forma de crear una tesis que le sirva a su autor incluso después del doctorado.
Cómo elegir el tema
En esta guía, Eco aconseja al sufrido estudiante que dedique sus mayores esfuerzos al método de trabajo, sin importar de qué tema trate la tesis. Para el italiano, escoger un asunto que nos resulte agradable facilita todo este proceso, pero es algo secundario. "No hay ningún tema que sea verdaderamente estúpido. Trabajando bien se sacan conclusiones útiles incluso de un tema aparentemente remoto o periférico", dice en su libro.
Dicho esto, aconseja al autor o autora de la tesis que busque un tema "que esté relacionado con sus lecturas, su mundo político, cultural o religioso". También que recurra a fuentes que estén a su alcance físico (con internet esto ya no debería ser un problema) e intelectual y que se decida por un cuadro metodológico de la investigación acorde a su experiencia.
¿Cuánto tiempo debería llevar hacer la tesis?
Eco pone unos límites temporales claros: no menos de seis meses y no más de tres años. Se refiere al tiempo total, desde que se decide el tema a tratar hasta que se termina de revisar el texto redactado. Menos de eso, es un artículo de periódico o revista, como este que estás leyendo ahora mismo.
Si eres de los que quieren escribir una tesis exprés, Eco te da unos mínimos para hacer un escrito en seis meses. Hay que centrarse en un tema muy concreto y delimitado; que sea contemporáneo, para que la bibliografía y autores a los que citar sean de fácil acceso; y que los documentos que la acrediten estén muy bien localizados.
Quien pase más de tres años en ello debería darse cuenta, dice el italiano, que ha comenzado una tesis "superior a sus fuerzas" o que no está sabiendo poner límites: lo quiere contar todo. Tras este tiempo también existe la posibilidad de haberse convertido en el típico estudiante que jamás va a doctorarse (a no ser que recurra a las prácticas poco legales que aconseja al principio del libro).
Cuidado con las fuentes
Si alguien escribe una tesis sobre Umberto Eco, los libros de Umberto Eco son la fuente primaria. Los libros y escritos dedicados a Umberto Eco son fuentes secundarias. "En teoría, un trabajo científico serio no tendría que citar nunca a partir de otra cita, aunque esta no verse directamente sobre el autor que se estudia. (...) Lo que no se ha de hacer jamás es citar de una fuente de segunda mano fingiendo haber visto el original", defiende en el libro.
El filólogo exige un comportamiento muy estricto al autor de la tesis. Además de recurrir a fuentes primarias, esas fuentes primarias deben de ser, en la medida de lo posible, de primera mano.
Volviendo al ejemplo del propio Eco, se debe recurrir a ediciones originales de sus libros (la traducción ya es una fuente secundaria). Si se menciona alguno de los discursos que dio a lo largo de su vida, se debe recurrir al registro oficial de ese discurso y no a una reproducción que aparezca en otros libros o en medios de comunicación. A saber qué criterio han tenido esos autores a la hora de reproducirlo.
Wikipedia, por tanto, queda fuera de una tesis seria. Ese artículo, también. Si alguien quiere mencionar en su tesis los consejos de Umberto Eco para escribir una tesis, este artículo solo puede servirle de una aproximación inicial, pero la fuente idónea es la edición original del libro, publicado en italiano en 1977.
Incluso una traducción del libro, como el que utilizamos para este artículo, es para Eco "una prótesis como la dentadura postiza o las gafas, un medio para llegar de modo limitado a algo que está más allá de nuestro alcance". La única forma de citar Wikipedia o este texto en una tesis es si está centrada en la repercusión en internet sobre los escritos de Eco.
Y también cuidado con las citas
A la hora de citar o parafrasear a otro autor hay que cumplir con ciertas normas para no caer en el plagio (voluntario o involuntario). En cada cita deben figurar claramente reconocibles el autor y la fuente impresa o manuscrita y relacionarlas las veces que hagan falta con el texto citado, para que no haya error. "Citar es como aportar testigos en un juicio.Tenéis que estar siempre en condiciones de encontrar los testimonios y de demostrar que son aceptables. Por eso la referencia tiene que ser exacta y puntual (no se cita a un autor sin decir qué libro y qué página) y verificable", defiende Eco.
A la biblioteca
Teniendo en cuenta estos consejos, la llegada de internet no deja obsoleta la guía del escritor italiano, porque internet no deja de ser una fuente secundaria y de segunda mano. A no ser, por ejemplo, que un documento original esté colgado en formato PDF en la web oficial de la institución que aloja ese documento.
En el resto de casos, nos toca ir a la biblioteca o a los archivos. Encontrar el lugar adecuado no es suficiente. Eco destaca que hay que saber buscar en el catálogo, tener algo de intuición para no perder tiempo y no ser tímido: pregunta al bibliotecario.
A la hora de incluir las referencias bibliográficas debe aparecer el nombre completo del autor, nada de iniciales, y debe mencionarse la editorial que ha publicado el libro, no solo el lugar y año de publicación, que puede inducir a error. Como dice Eco, que la Universidad de Oxford haya editado un libro no significa que se haya editado en Oxford, ya que su casa editorial tiene sedes en otras ciudades del mundo.
Empieza por el "final"
Escribir el título, la introducción y el índice final "es precisamente las cosas que todos los autores hacen al final", recuerda Eco, quien en cambio aconseja abordarlo al principio del proceso. "Escribir cuanto antes el índice como hipótesis de trabajo sirve para definir cuanto antes el ámbito de la tesis", dice.
Si luego hace falta reestructurarlo, es mejor tener un punto de partida a reestructurar, argumenta: "Una tesis es como una partida de ajedrez, tiene cierto número de movimientos, pero desde el principio hay que estar capacitado para predecir los movimientos a efectuar con vistas a dar jaque mate al adversario; de otro modo, no se conseguiría nada".
No escribas para el director de tu tesis
Lo ideal para Eco sería plantear la tesis como algo que otros consultarán en el futuro, aunque a menudo el objetivo inmediato sea contentar a quienes van a evaluarla. Su consejo: "escribe a la humanidad". No pienses en tu director de la tesis o en otros doctorados, ni siquiera en los periodistas que, quizá, años después vayan a husmear en ella.
En otras palabras, sé sencillo y didáctico. No seas Proust, como dice Eco: "Evitad el exceso de pronombres o subordinadas". Y reescríbela tantas veces como haga falta, aconseja el italiano. "Volved a menudo al principio. Escribid todo lo que se os pase por la cabeza pero solo durante la primera redacción. Después notaréis que os habéis dejado arrastrar por el énfasis que os ha alejado del centro de vuestro tema. Entonces quitaréis las partes entre paréntesis y las divagaciones y las pondréis en nota o en apéndice".
Cómo se hace una tesis profundiza en aspectos mucho más concretos, como por ejemplo la elaboración de fichas de lectura, notas a pie de página y fichas para citas.