Zuleika Esnal habla con más de 50 mujeres por día, de lunes a domingo, a través de sus redes sociales. Las mujeres que se dirigen a esta actriz argentina le cuentan historias personales de abusos o agresiones machistas. Esnal las escucha e intenta ayudarlas. De este proyecto, llamado Estoy Acá, trataba su ponencia en el encuentro Mujeres que inspiran, en Buenos Aires. El 12 de octubre, la tuitera LegaspiBlanca publicó un fragmento de esta charla en su cuenta de Twitter, y en menos de una semana ha superado los 48.000 compartidos.
En este fragmento –puedes escuchar la charla completa en la parte inferior de este artículo– Esnal habla de los peligros de algo que debería ser tan seguro y sencillo como volver a casa sola de noche. "Avisar que llegamos vivas como si no tuviera que ser algo normal. Como si no fuera un derecho caminar a cualquier hora por la calle vestida como quiero, sin dar explicaciones", cuenta a Verne. "Pues no. Hoy llegar viva es milagro casi. Y yo no quiero milagros. Quiero derechos". El vídeo arranca con Esnal explicando por qué, al regresar a casa, las mujeres deberían escribir a sus amigas para decir “estoy viva” en vez de “llegué bien”:
No digan más “llegué bien”, digan “estoy viva”. Porque lo que estamos avisando cuando decimos “llegué bien” es que nadie nos violó, que no estamos en una bolsa de consorcio [de basura]. Estás diciendo que estás viva, no que llegaste a casa. Prueba a no llamar, prueba a no avisar a tu amiga de que llegaste, y cuenta las veces que te llama por teléfono. ¿Sabes por qué? Porque si no llamaste, es probable que te estén cogiendo en la parte de atrás de un taxi. Por decirte una, ¿no?
Después, Esnal habla de la motivación para llevar a cabo el proyecto Estoy Acá. Es solo una: que ella, a diferencia de otras mujeres que han fallecido por agresiones machistas, está viva, así que puede contarlo.
Así que si me preguntan por qué hago esto… Porque estoy viva. Porque nadie me violó, ni mis novios me cagaron a trompadas ni aparecí en una zanja. Porque puedo, porque estoy, porque soy libre. [...] Yo también me fui de mil bares con cualquiera, anduve sola, hice dedo, ¿y qué? Viví para contarlo y resulta que es un lujo, que tengo que estar agradecida. No les debo nada, ¿eh? Ninguna de nosotras les debe nada. No me hacen ningún favor dejándome con vida. Que la tierra tiemble. Que se venga lo que tenga que venir. Yo estoy acá. Ah, y que sea ley, por favor.
Con la frase “y que sea ley, por favor”, Esnal se refiere a la Ley del Aborto argentina, que no salió adelante en la votación del senado. En su muñeca, lleva el pañuelo verde, símbolo del movimiento a favor de la regularización del aborto en el país.
Una historia que comienza con otro viral
En 2016, después de que se conociera el caso de una violación múltiple a una menor en Brasil, Zuleika Esnal publicó un texto en Facebook que acabó convirtiéndose en un éxito viral. La charla de Esnal en Mujeres Que Inspiran –unos ciclos de conferencias de mujeres con proyectos que buscan mejorar la calidad de vida de otras personas– arranca con una versión en vídeo de este texto, cuyas copias han vuelto a viralizar esta semana tanto como post de Facebook como vídeo en Twitter:
"Báncatela [nombre con el que se conoce este texto] fue lo primero que escribí, escondida debajo de un escritorio en mi trabajo porque estaba prohibido usar el movil", cuenta. "Fue un 30 de mayo de 2016. Estaba llena de bronca y de dolor. Tres días después de subirlo a mi página [de Facebook] No Me Calmo Nada, cientos de mujeres me habían escrito. Y yo las escribo a ellas. Por todos lados voy sembrando hermanas. Les debo todo".
Tras la publicación del texto original, Esnal comenzó a recibir mensajes de mujeres que le contaban sus historias personales de abusos y agresiones machistas. "Mi único recurso soy yo y un móvil encendido. 8000 mujeres me hablaron", dice en la charla. Así fue como surgió Estoy Acá, "una especie de campaña espontánea, donde la gente ofrece gratuitamente lo que tenga para ofrecer a estas mujeres. Yo soy actriz y escribo, si fuera veterinaria les estaría curando al perro", afirma.
"Estoy Acá", cuenta a Verne, es una expresión que Esnal ha heredado de su padre. "Me lo decía siempre. Negrita, yo estoy acá, ¿sabés? cada vez que me necesites", recuerda. "Cuando estas mujeres empezaron a escribirme yo no sabía qué decir y entonces decía estoy acá. Y no es menor. Porque son mujeres para las que nadie nunca está".
A continuación, puedes ver la charla completa de Zuleika Esnal: