Aarón Gómez es cómico, tiene 38 años y sufre ansiedad desde los 18. "Soy un antiguo usuario de la ansiedad", bromea en una charla telefónica con Verne. Las punzadas en el pecho, la garganta seca o los problemas para respirar son algunos de los síntomas que ha sentido durante estos años, y los ha plasmado en un vídeo de humor en el que él mismo personifica a la ansiedad. Lo ha publicado este 14 de mayo y, en menos de 48 horas, se ha compartido más de 1.500 veces en Facebook y, en Twitter, ha superado las 280.000 reproducciones.
En el vídeo puede verse cómo Víctor Hubara –otro cómico que tamsbién ha padecido ansiedad– intenta llevar una vida cotidiana en la que Gómez, que personifica a esta enfermedad, se lo pone complicado. Cuando va a levantarse de la cama, por ejemplo, Gómez empieza a golpearle en el pecho o, en medio de una entrevista de trabajo, le acribilla con todo lo que tiene: le ahoga, le provoca palpitaciones o le hace temblar. "La idea de representar la ansiedad personificándola nos parecía divertida y queríamos que la gente que la sufre se sintiera identificada", explica Gómez. "Los síntomas que aparecen son algunos de los que nosotros mismos hemos sufrido".
La ansiedad, como ya hemos explicado en Verne, tiene multitud de síntomas y formas de manifestarse. "La verdad es que tuvimos que descartar síntomas para acortar el vídeo", cuenta Gómez. "Además, la ansiedad es muy creativa, cuando ya tienes controlados unos síntomas... te sorprende con otros nuevos".
El vídeo de Gómez y Hubara finaliza con la pantalla en negro y el siguiente mensaje: "Todos los actores de esta tontería viven con ansiedad. Si estás pasando por ello no dudes en pedir ayuda profesional y pasa de sufrir la ansiedad a convivir con ella". Según un estudio publicado por la Sociedad Internacional de Trastornos Afectivos, más del 10% de la población adulta en España ha sufrido ataques de pánico o ansiedad. Sin embargo, hay muchos casos en los que el afectado no pide ayuda profesional o tarda años en pedirla.
Gómez fue uno de los que tardó mucho en decidirse a ir al psicólogo. "Perdí muchísimo tiempo pensando que podría superarlo yo solo", cuenta. "El estigma que muchos tenemos asociado con ir al psicólogo hizo que no acudiera a uno hasta los treinta y pico". Antes, hubo temporadas, según cuenta, en las que se sentía incapaz de salir de casa o coger un avión. "Al final te das cuenta de que con un poco de ayuda puedes superarlo, por eso era tan importante incluir el mensaje de que hay que pedir ayuda", explica.
Si conoces a más personas con ansiedad, aquí puedes leer algunos síntomas para identificar un ataque de ansiedad y pautas para ayudar a quien lo sufre. Y, si quieres saber más sobre la importancia de recibir ayuda profesional a tiempo, puedes leer la historia en primera persona de Pilar C, que sufre ataques de ansiedad crónicos por no haberlos tratado a tiempo.