Karla Puch es una joven estudiante de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Autónoma de Yucatán. Para costear sus estudios, la estudiante de 22 años presta sus servicios como fotógrafa en bodas y eventos sociales en Kanasín, una ciudad a unos cinco kilómetros de Mérida, la capital yucateca, en el sureste de México. Pero la contingencia sanitaria por la covid-19 le ha impedido seguir tomando fotos, por lo que hizo un montaje de una boda con sus juguetes.
La serie de 55 fotografías fue publicada en Facebook, donde ha sido compartida más de 44.000 veces en las primeras 36 horas tras su publicación. “Lo hice sin un propósito, sino para practicar un poco mi fotografía”, cuenta Puch a Verne, vía telefónica. La sesión requirió un trabajo de dos días al exterior de la casa de la fotógrafa
Puch encontró sus juguetes durante los días de contingencia, por lo que planeó hacer este montaje con su madre y su hermana, quienes cosieron y bordaron los trajes a mano. “Las bodas aquí suelen ser muy tradicionales, por eso quise que fuera de ese estilo”, cuenta. A Barbie y las muñecas las vistió con pequeños ternos, que es el traje típico que usan las comunidades mayas en Yucatán y que son bordados tradicionalmente en punto de cruz. Para Action Man (el novio) y el resto de los asistentes, se les vistió con pequeñas filipinas, guayaberas y alpargatas para los zapatos.
Pero no solo se trató de un montaje de una ceremonia donde Thanos (el personaje de la saga Avengers) fue el sacerdote. También hubo un momento para la fiesta y para que Barbie lanzara el ramo. “El baile de las cintas es muy tradicional y los novios y los invitados se cruzan para formar una cinta multicolor”, dice.
Puch y su familia tienen orígenes mayas y la estudiante confiesa estar muy orgullosa de sus raíces. “Mis padres hablan maya y aunque yo no lo hablo bien, me gusta mucho las costumbres, la vestimenta y la música”, indica. Aunque sus estudios están en pausa por la contingencia sanitaria, Puch ha dedicado su tesis al imaginario social de nativos y migrantes de su ciudad, Kanasín. “Espero poder titularme en un par de meses, si es que la cuarentena no dura mucho”, comenta.
La fotógrafa yucateca planea seguir tomando fotografías y pronto subirá a sus redes sociales un video con el proceso para hacer este montaje, que incluye la confección de las prendas tradicionales para la boda entre Barbie y Action Man.