El anuncio de la actualización de la política de privacidad de WhatsApp no le ha caído bien a los usuarios. El hecho de que la aplicación (propiedad de Facebook) quiera compartir datos con otras aplicaciones como Instagram y el propio Facebook, ha orillado a muchas personas a buscar nuevas alternativas de comunicación.
Y nada mejor que regresar a los (muy) viejos conocidos. Preocupados por su privacidad, decenas de tuiteros en México y en el mundo, han decidido abandonar WhatsApp. Claro que nadie planea renunciar a la comunicación a distancia, más necesaria que nunca ahora que una segunda o hasta tercera ola de coronavirus tiene a buena parte de la población en confinamiento hasta nuevo aviso. Y nada como los viejos aliados.
Los millennials y generaciones anteriores no podrán olvidar los radiolocalizadores o beepers. En su época dorada en los años noventa, lograron tener casi un millón de usuarios en México. Luego llegaron los teléfonos móviles y fuimos testigos de la extinción masiva de estos aparatos en 2012. Si estas opciones no te convencen, o te parecen aún demasiado digitales, siempre puedes recurrir a servicios más antiguos. Palomas mensajeras, telegramas o hasta la ouija. No garantizamos que haya buena recepción en ninguna zona.