Ya se ha convertido en tradición recurrir a las ilustraciones para mostrar solidaridad en redes sociales tras un atentado terrorista. Los ataques de este martes contra el aeropuerto Atatürk de Estambul han causado hasta el momento 36 muertos y 147 heridos. No es la primera vez que Turquía afronta una situación similar en los últimos meses, así que muchos de los dibujos que comparten los usuarios existen desde hace tiempo. Algunos de ellos hacen referencia a la jerarquía de la muerte, que denuncia una menor cobertura informativa cuando estos sucesos ocurren fuera de Occidente.
Desde el martes por la noche, etiquetas como #Estambul o #AtentadoEstambul han logrado ser trending topic en el Twitter español. El hashtag internacional al que se ha recurrido ha sido #PrayForTurkey y viene acompañado por ilustraciones e imágenes como las siguientes.
Dedicamos nuestros rezos a todas las familias que se han visto afectadas.
Imagen compartida por el jugador de fútbol turco Hakan Çalhanoğlu.
Un país musulmán atacado durante el Ramadán destaca que el terrorismo no tiene religión.
La mayor presencia en redes de estas etiquetas con respecto a ataques anteriores en Turquía se debe en parte a que, en esta ocasión, la cobertura informativa ha sido algo más completa. Una de las razones por lo que ha sido así es la ubicación del ataque, ocurrido en uno de los aeropuertos más transitados del mundo.
Nuestros corazones están en Turquía, donde al menos 28 personas fueron asesinadas y docenas heridas.
Homenaje a todos los muertos, víctimas de la barbarie ciega...
Mi corazón está contigo, Estambul. Mis pensamientos y mis plegarias van para todos los afectados por esta terrible tragedia y para todos los que en el mundo sufren violencia sin sentido como esta.
Un problema habitual a la hora de informar sobre atentados en lugares ajenos a Occidente es la falta de recursos que permitan completar la información. Esa ausencia de datos fiables hace que se reduzca la presencia de estas coberturas en los medios de comunicación. Pero la importancia de Atatürk como aeropuerto hace que esté dotado de un gran número de cámaras de seguridad, que ha permitido contar esta vez con mayor registro visual de lo ocurrido.
El hecho de ser un lugar de paso para ciudadanos de todo el mundo también ha incrementado el interés de los medios occidentales, siempre pendientes de si hay víctimas locales entre los fallecidos.
Aun así, una de las ilustraciones que está circulando con más fuerza es la viñeta que modificaba la de Le Monde y que recordaba los múltiples atentados que ha sufrido Turquía sin que la prensa occidental haya prestado la misma atención. La imagen ya se hizo viral el pasado 22 de marzo, cuando Bruselas sufrió un atentado similar al ocurrido este martes en el aeropuerto turco.
Los turcos, que han sufrido de forma igualmente cruel atentados terroristas, comparten el dolor de los belgas.
También se ha recuperado, desde la popular cuenta en Twitter de admiradores del artista Banksy, una ilustración que ya se utilizó tras los atentados en Ankara el pasado mes de marzo y que ejemplifica la jerarquía de la muerte, un término que emplean los medios anglosajones para describir cómo y por qué damos más cobertura a unas víctimas frente a otras.
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En Verne ya hemos hablado de las razones por la que existen diferencias de trato en función de dónde ocurren los hechos violentos.
1. La proximidad. Nos interesa más lo que ocurre en nuestro país y en países cercanos, además de si hay alguna víctima local. No es necesariamente algo negativo: quizás hemos viajado a París o conocemos a gente que trabaja en Bruselas, por lo que es natural que tanto lectores como periodistas nos sintamos más próximos a estas ciudades y haya más interés por lo que ocurre allí.
2. La calidad de la información. Son muchos los medios que cuentan con corresponsales o enviados especiales en Bruselas. En cambio, no ocurre lo mismo con Pakistán u otros países de fuera de Europa y América, donde en ocasiones solo se cuenta con noticias de agencias y hay menos periodistas sobre el terreno o simplemente que conozcan el país, la lengua y sus medios de comunicación. La información sobre lo ocurrido en Bélgica es más accesible y más fiable.