El maratón Guadalupe-Reyes aún no termina. Eso quiere decir que te quedan algunos días de fiesta y felicidad plena, pero tarde que temprano te enfrentarás a ese monstruo invernal conocido como cuesta de enero. Es una criatura invisible que devora tu dinero y eleva tus gastos personales. Y con la situación económica que vive México desde el cierre de 2016, la cosa se pondrá un poco más difícil. Tranquilízate y respira hondo. Dos expertos nos dieron algunos consejos para que la caída sea menos brusca. Pero antes les pedimos responder estas siete preguntas para que entiendas mejor por qué sucede la cuesta de enero y te sientas con más valor para ver tu estado de cuenta.
¿Qué eso de la cuesta en enero?
Es un efecto económico que sucede a inicios de cada año en México. “Es un periodo en la gente se enfrenta a deudas que surgen en el periodo de invierno y donde se empiezan a dar cuenta de que gastaron de más”, explica Raymundo Campos investigador en economía del Colegio de México. “También es la época cuando deben pagarse impuestos como el predial y la tenencia, estos y otros pagos (como las colegiaturas y las rentas) se juntan”.
¿A quién le afecta?
Según una encuesta de la consultora Parametría, tres de cada cinco mexicanos saben que sufrirán los efectos de la cuesta de enero antes de que inicie el mes porque ha gastado mucho en la época navideña y ahorró muy poco en el año. Esto no resulta raro cuando un estudio de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el INEGI en 2015 muestra que el 23% de los mexicanos no ahorra regularmente y solo el 44% tiene una cuenta de ahorros activa.
¿Por qué no aprendemos la lección?
“En general estamos acostumbrados a vivir en el presente y no pensar en el futuro”, apunta Campos. “Esto sucede sobre todo en una cultura de consumo y en una época de fiestas en la que el consumo es uno de las actividades principales. Es muy difícil controlarse cuando existen tantas tentaciones a tu alrededor y ves a todo mundo hacer lo mismo”.
¿Cómo será la cuesta este año?
Particularmente difícil, es el diagnóstico de Alberto Tovar, profesor de finanzas del Tecnológico de Monterrey. “Hay una alta volatilidad (incertidumbre en los mercados financieros) y el Banco de México recientemente elevó las tasas de interés. Esto significa una elevación en los intereses de tus deudas”.
¿Y el aumento del precio del dólar no nos afecta como dicen los de Hoy?
Por desgracia sí, explica Tovar. “Las empresas usualmente hacen revisión de sus precios a principios de año, algo que no hace en el último trimestre del año anterior porque se atraviesa la época navideña”, comenta el también director de El Financiero para la región norte. “Estas deberán ajustar sus precios basadas en el precio actual del dólar, lo que hará que se eleven”. La subida del precio del dólar también es un factor que provoca un aumento en la inflación (el incremento de los precios de los bienes y servicios).
¿Se puede evitar la caída?
Sí, si no te endeudas en las fiestas decembrinas. “Asociamos la Navidad con grandes gastos, grandes fiestas, pero se puede ser feliz gastando lo que tiene y no lo que no tiene”, dice Campos. “Cada familia deberá sopesar las ventajas y desventajas de comprar cosas a crédito. No está mal comprar a crédito si es algo que se puede sobrellevar. Si no, los meses siguientes pueden convertirse en una carga muy pesada para todos”.
Demasiado tarde, ya quemé mis tarjetas ¿qué puedo hacer para amortiguar el golpe?
Basados en los consejos de ambos expertos hicimos esta lista que te ayudará a no tener que recurrir al atún y a las galletas el resto del mes.
1. Haz una lista de todo lo que compraste en diciembre, lo que debes pagar en enero, cuánto dinero tienes y cuánto tendrás en el mes. Eso no solo te ayudará a estar al tanto de tus deudas, también te servirá para prevenir gastos grandes y/o innecesarios. “No es necesario hacer esto todo el año, tan solo para gastos de diciembre y enero”, dice Tovar.
2. Lee las letras pequeñas de los contratos y los préstamos. Si vas a comprar algo a crédito, entérate bien cuáles son los términos que exige la tienda y cuánto deberás pagar mensualmente y en intereses. Sé igual de meticuloso con los préstamos del banco, si no tienes de otra más que pedir uno para cubrir tus gastos de inicio de año. No tengas miedo a preguntar y preguntar otra vez si el banquero o el prestamista no se da a entender. Si sospechas de alguna mala jugada del banco, consulta a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). Si tu bronca es con una tienda, habla con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
3. Paga las deudas que puedas en cuanto puedas. No dejes que esos intereses se acumulen, porque pueden aumentar mucho por la situación económica. Tal vez tendrás que apretar el cinturón unas semanas, pero solo así podrás librarte poco a poco de la carga, en vez de arrastrarla hasta febrero y marzo.
4. Guarda dinero para los gastos que no puedes evitar. El predial, la tenencia, la renta, la colegiatura: no puedes librarte de esos pagos. Lo mejor es que desde ahora, si te es posible, apartes el correspondiente a esos gastos y no toques ese dinero para nada. Lo ideal es que uses tu aguinaldo o parte de tu aguinaldo para cubrir un porcentaje de estos gastos. Ojalá lo hayas ahorrado un poquito. Si no, guarda lo que puedas y espera con ansias la primera quincena del año. Y no lo olvides: respira hondo y sigue adelante.