Por qué son necesarios los simulacros de balacera en las escuelas de México

Los altos índices de violencia obligan a integrar nuevos protocolos de seguridad

Alumnos y personal docente del CBTIS 114, en Ciudad Juárez, formaron parte de un simulacro de balacera en 2011. Foto: Cuartoscuro.

La creciente violencia en México está cambiando la vida de muchas personas y ahora también tiene sus efectos en los centros escolares, mediante la realización de simulacros para protegerse en caso de una balacera. Una escuela primaria en Baja California Sur realizó en días pasados un ejercicio con maestros, alumnos y la policía municipal simulando un tiroteo.

El video de este simulacro ha sido retomado por varias cuentas y medios de comunicación, lo que ha generado un debate sobre la pertinencia de realizar este tipo de ejercicios, ya que algunas personas consideran que se trata de una forma de normalizar la violencia.

El número de enfrentamientos y de víctimas en lo que va del año es suficiente motivo para realizar este tipo de simulacros, dice a Verne Gabriel Regino, abogado y especialista en temas de seguridad. “Los ejercicios de prevención ante estos riesgos son necesarios, sin duda. Estamos en crisis humanitaria, los niños que mandamos a la escuela ahora deben estar preparados ante un evento de esta naturaleza”, dice vía telefónica.

Cifras de la iniciativa de seguridad Semáforo Delictivo, indican que 2017 ha sido el peor año en cuanto a violencia en la historia reciente del país. En lo que va del año se contabilizan 13.513 ejecuciones del crimen organizado, así como 18.505 homicidios, un incremento de 53 y 22% para ambos delitos.

Rogelio Flores Morales, doctor en psicología y académico de la UNAM, dice a Verne que se debe tener un protocolo de seguridad ante los tiroteos como se tiene ante incendios o sismos, pero añade que la forma en que se llevó a cabo el simulacro en Baja California Sur fue errónea. “Más que proteger, lo que se genera es miedo y en casos extremos se puede traumatizar a los niños”, indica vía telefónica.

La entrada de los uniformados y el sonido similar al de metralletas y balas son dos de los elementos que pueden generar estrés excesivo en los menores. “Lo importante es que los niños estén informados, que sepan que puede ocurrir una balacera, pero sin sobredimensionar las cosas, pues ellos no asimilan estos eventos como un adulto”, señala el psicólogo.

Los simulacros ante balaceras forman parte de los protocolos del programa Escuela Segura, que la Secretaría de Educación Pública implementa en las escuelas del país, aunque no se detalla si los ejercicios deben incluir el sonido de las balas. Hasta el momento, la SEP no ha respondido a la solicitud de información de Verne.

Para Regino, especialista en temas de seguridad, los Estados con mayor índice de violencia son los que deben de incluir este tipo de simulacros, porque ahí aumenta la probabilidad de que haya enfrentamientos armados en las zonas escolares. “Estos ejercicios deben ir acompañados de un programa psicológico y pedagógico, pero deben hacerse equiparando, aunque pueda ser exagerado, como se hacen en las zonas sísmicas”, dice el especialista.

Los tiroteos en centros escolares han sido muy difundidos en redes sociales. En 2011, el video de una maestra de preescolar en Monterrey (Nuevo León) que pide a sus alumnos cantar canciones al momento de la balacera, fue compartido miles de veces. En junio de este año también se llevó a cabo un enfrentamiento en las inmediaciones de una escuela en Reynosa (Tamaulipas). La violencia tampoco es ajena a los menores de edad, pues un niño en Tamaulipas inventó una mochila para protegerse de un enfrentamiento armado.  "Vivimos un alto índice de delincuencia. La mochila me hace sentir más tranquilo", dijo a Verne en 2016.