Si te estás preguntando cómo hace la gente para hipotecarse, lee esto

Seguro que estos días ha salido el tema. Y tú, que vives de alquiler, preguntas qué mundo es ese

El préstamo hipotecario más sonado de la semana ha sido el de Pablo Iglesias e Irene Montero para comprar un chalet con piscina en el municipio madrileño de Galapagar. Se trata de una hipoteca por importe de 540.000 euros que la pareja terminará de pagar la casa cuando los niños que esperan tengan 30 años. Pero no son los únicos ciudadanos que se hipotecan: con los alquileres por las nubes y las condiciones bastante accesibles -a una parte de la población, claro-, estas no dejan de crecer.

En la serie Coqueto, Mejor Ver contamos lo difícil que es alquilar casa en algunos lugares de España cuando tu presupuesto es limitado: hicimos la prueba con 600 euros. Si comprar te parece cosa de otra galaxia, al menos nos proponemos ser tu traductor particular, para que sepas de qué hablan los que hablan de hipotecarse.

¿Pero de verdad la gente se sigue hipotecando? Sí, pero te lo diré con datos para que te lo creas. Según el INE las hipotecas aumentaron un 9,7% en 2017 respecto al año anterior. Así llegó hasta las 310.096, la cifra más alta desde 2011. De media, a la gente que pidió una hipoteca el año pasado le dieron 116.709 euros.

¿Y cuánto les va a durar la condena? Unos 20 años de media.

Si soy mileurista y llevo trabajando un año, lo que me parece un éxito para mi generación, ¿puedo pedir una hipoteca? 😒 Lo tienes complicado, no te vamos a engañar, pero no imposible. Los bancos piden a los hipotecados ahorros e ingresos estables. Estamos hablando de tener ahorrado el 35% de lo que valga la casa, ¿cómo lo ves? Además, quieren que tengas un trabajo fijo y que lleves varios años en la empresa. En tu caso quizá te pedirían tener un avalista, una persona (que te quiera mucho) que respondiese con su patrimonio por si un día dejas de pagar la hipoteca.

Supongamos que convenzo a alguien para que me avale -que yo al Monopoly era un hacha- o me la conceden por méritos propios, ¿de cuánta pasta estamos hablando? Del 80% de valor de tasación de la casa.

Tasa… ¿qué? La tasación es poner un precio a la vivienda. Lo hace un profesional independiente, homologado por el Banco de España. De este modo, el banco conoce cuánto vale tu futura casa y cuál es el riesgo que asume con el préstamo. Es decir, te pueden pedir 600.000 euros por una casa y que luego el tasador la valore, por ejemplo, a 700.000 -lo que sería bueno para el futuro hipotecado- o a 400.000, y entonces te darían una hipoteca máxima del 80% de 400.000, no de 600.000.

Y si tengo deudas pendientes por ahí, ¿me darían el préstamo? Si figuras en un fichero de morosos, paga primero lo que debes, porque seguramente los bancos no te van a prestar ni un euro y no vas a quedar muy bien cuando te digan el motivo.

¿Qué significa todo lo que escucho en televisión de tipos de interés, comisiones y eso del  TAE? El tipo de interés es lo que pagas de más al banco. Si tienes una hipoteca, al cabo de unos años no sólo devuelves 540.000 euros al banco, sino esa cifra más los intereses. Este porcentaje no debe mirarse aislado, sino en combinación con las comisiones (cantidades que la entidad te cobra por distintos servicios de los que debes informarte) y el plazo de amortización (los años que dura tu condena). Todo esto te da el coste real, la TAE (Tasa Anual Equivalente).

Y el famoso Euríbor, ¿sigue teniendo algo que ver o le echaron de la zona euro? Por supuesto que sigue dando guerra, la relación entre las hipotecas y el euríbor es decisiva para fijar los tipos de interés de estas. Aunque actualmente está bajo, no se descarta que vuelva a subir... Y entonces es cuando los hipotecados a tipo variable echan chispas por la boca.

Una cuestión más sentimental pero de bolsillo. Si me compro una casa con mi pareja, ¿puedo pedir una hipoteca al 50% aunque no estemos casados? Sí. Según el experto en hipotecas Miquel Riera, de HelpMyCash.com, dado los salarios tan bajos que hay, muchas parejas se ven obligadas a pedir la hipoteca conjuntamente. “Los bancos también prefieren que haya dos titulares, ya que así tienen que asumir un menor riesgo de morosidad”,  explica a Verne.

Sinceramente, no me fío mucho de mi estabilidad laboral, ¿a cuántos años como máximo podría soñar con pedir una hipoteca? Hasta 40 años.

Si aún no me lo puedo permitir, pero cuando tenga 40 quiero pedir una hipoteca a 30 años, ¿me la darían? Depende del banco. Algunos tienen un límite de edad que el hipotecado no debe superar antes de pagar la última cuota: suele estar entre los 70 y los 75 años.

Últimamente se habla mucho de si son más convenientes las hipotecas a tipo fijo o variable 😵. ¿De qué va eso? A tipo fijo significa que pagarás la misma cuota siempre. En una variable la cuantía puede cambiar en función de la evolución del Euríbor. Comparar hipotecas a tipo fijo y a tipo variable es complejo, ya que no sabemos cómo evolucionará el Euríbor ni la inflación.

Si mi hipoteca es de 200.000 euros, por ejemplo, ¿me puedo hacer una idea de cuánto voy a pagar en total (con intereses, comisiones…)? Digamos que te podrías hacer una idea. Juan Villén, responsable de Idealista/hipotecas, explica a Verne que, en la mayoría de casos, es difícil saberlo con exactitud. Por ello, existen simuladores como este en los que puedes ver cómo puede variar. “Es importante simular variaciones en el tipo de interés, recordemos que en 2008 el Euribor llegó a estar por encima del 5%, y además hay que conocer todos los impuestos y gastos que conlleva tanto la compra como la hipoteca”, dice Villén. 

Y si en unos años me va todo genial y quiero una hipoteca para una segunda vivienda en la playa, ¿sería posible? Es que no soy de sueños baratos... Sí, ¡y enhorabuena! Aunque los bancos suelen financiar mayor porcentaje de primeras viviendas que de segundas o locales.

Una cosa más, si 2018 es el año en el que vas a empezar la relación más larga de tu vida, quizá te interese leer esto: