La alumna adolescente se presentó al examen sin haber estudiado ni una sola línea del temario, pero a la profesora le conmovió tanto su historia que decidió dar un giro al sistema de evaluación. La docente argentina Lucía Gorricho cuenta en su blog personal el relato de una estudiante sin apenas recursos que necesitaba aprobar la asignatura de Geografía para continuar sus estudios. El relato sobre la precariedad educativa en el país se ha convertido en viral y ha aparecido en el portal Menéame.
"Esta semana me citaron para evaluar a una estudiante que debía una materia que la habilitaría, en caso de aprobarla, a pasar de año. El director me anticipó que el nivel académico no era bueno pero que era una alumna que se esforzaba mucho para estar en la escuela", explica Gorricho en su bitácora digital.
La estudiante de 14 años, de nacionalidad boliviana y cuya familia trabaja en una plantación de fresas de la zona, explicó que desconocía por completo la materia a evaluar.
"Como no fue estudiante mía, decidí preguntarle a ella los temas que habían visto en geografía el año anterior; pero no se acordaba ninguno. Con piel morena y voz muy bajita, me dijo que no había podido estudiar porque no tenía libro ni carpeta. Entonces le dije que yo tenía toda la voluntad de aprobarla pero que era fundamental que escribiera algo que justificara la nota", prosigue la educadora.
Sierra de los Padres es el lugar donde se sitúa la escuela secundaria a la que acuden profesora y alumna. Se trata de una localidad cercana a mar del Plata que cuenta con una población de 4.000 habitantes y "está compuesto por sierras de unos 150 metros de altura" en el sistema montañoso de Tandilia.
"Hay varias agroempresas operando en la zona y todas contratan mano de obra boliviana. Han recibido diversas denuncias por parte de organizaciones sociales y ambientales por situaciones de semiesclavitud en relación a la mano de obra", asegura la argentina.
Examen improvisado
La profesora decidió improvisar un nuevo examen para la adolescente. Escribió en una hoja de papel en blanco dos preguntas: "Describir una actividad económica" y "Mencionar los aspectos más importantes de algún país latinoamericano".
La estudiante empleó dos horas en contar a lo largo de tres folios todo lo que sabía sobre el cultivo de la fresa y sobre Bolivia, el país que había abandonado para vivir en Argentina.
"La aprobé. La abracé cuando se fue. Le pedí permiso para compartir su texto en internet. Hacia tiempo que no corregía una evaluación con tanto entusiasmo. Todo el relato de esta nena de 14 años aportó sin duda, a mi formación como geógrafa y como docente. Comparto el desarrollo de la evaluación porque creo que no pueden quedar estos contenidos solo en mí", explica la profesora en su escrito, que incluye la transcripción íntegra del test e imágenes del mismo.
#Lobas @jorturdo pic.twitter.com/yEU4la1xrz
— Lucía Inés Gorricho (@gorricholucia) 26 de marzo de 2016
Desde que se publicara el pasado martes, el relato ha alcanzado más de 450 comentarios en su blog y ha despertado el interés de multitud de medios locales e internacionales. Garricho ha recopilado en un cuaderno algunas de los miles de reacciones de los lectores y tiene previsto entregárselo cuando se reencuentre con la joven. “Se lo quiero regalar para que lo tenga como diario, que escriba lo que le surja”, ha explicado al diario La Capital de Mar del Plata.
La repercusión de esta historia ha permitido a Garricho reflexionar sobre la precariedad educativa de su país: "El sistema de enseñanza está caduco porque no tiene en cuenta la realidad social de un grupo de alumnos cuya forma de vida no permite estudiar del modo en que se exige en la actualidad", ha declarado ella misma a una radio local.
"Estoy feliz de comprobar que somos muchas las personas que necesitamos ideas y prácticas liberadoras que nos acerquen un poquito más a la añorada libertad. Como dice Paulo Freire en 'Cartas a quien pretende enseñar': Es preciso atreverse, aprender a atreverse, para decir no a la burocratización de la mente a la que nos exponemos a diario". Estoy convencida que los pueblos tenemos el poder de crear nuestra propia educación. En eso estamos", comenta la educadora en sus redes sociales.
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