Cuba tiene varios registros en el Libro de Récords Guinness, como el puro más largo del mundo (90 metros), el salto de 2,45 metros del atleta Javier Sotomayor y las 44 piruetas de ballet en 30 segundos de Yat-Sen Chang. Ninguno de estos es tan famoso como el que batió Ubre Blanca, la vaca que tan solo el 25 de enero de 1981 produjo 109,5 litros de leche. Una vaca promedio alcanza su mayor producción durante los dos meses posteriores al parto, pero apenas alcanza los 50 litros diarios, según datos de la Secretaría de Agricultura mexicana.
Guinness también reconoció su producción en 305 días: 24.268,9 litros, entre 1981 y 1982. La vaca cubana no logró los récords mundiales de mayor producción anual (una de Canadá lo mantiene con 27.545 litros desde 1998). Sin embargo, en la base de datos de la organización, no existe un nuevo récord de producción diaria, por lo que no hay registro oficial de una vaca que haya superado a la Ubre Blanca.
Su alta producción de leche no fue una casualidad, sino un proyecto personal de Fidel Castro para superar la cifra de la vaca estadounidense Arlinda Ellen que mantenía el récord mundial de 80 litros desde 1975, según cuenta Jorge Hernández, veterinario de Ubre Blanca en el documental La Vaca de Mármol (2013) del cineasta cubano Enrique Molina. Ubre Blanca ya había sido elegida por los ganaderos de la finca en Isla de la Juventud entre un rebaño de 118 vacas. Por el tamaño de su ubre recibió un mayor cuidado y alimentación, cuentan los vaqueros de la finca La Victoria en el documental. A principio de enero de 1981 comenzaron a ordeñar a la vaca cada seis horas durante 24 días. “Estamos hecho mierda, la vaca y todo mundo”, comentó Hernández en la película.
El registro de la leche obtenida de Ubre Blanca era meticuloso y Fidel Castro o alguna de sus representantes llamaban a la finca constantemente para conocer la cifra. Estas se reportaban en los noticieros y los diarios locales como si se tratara del clima o del marcador de algún partido de fútbol, como se escucha en este video.
Finalmente, a finales de enero de 1981, la vaca cubana alcanzó la producción de más de 109 litros. Castro y un grupo de 26 periodistas (incluido un representante de Guinness) acudieron a La Victoria a visitar a la vaca y presencial la hazaña. Desde ese momento, el exmandatario cubano visitó varias veces a Ubre Blanca y la mencionó en muchos de sus discursos como un símbolo de los logros de la Revolución cubana, según un artículo de EL PAÍS y The Wall Street Journal.
Al ser un orgullo nacional, surgieron varios mitos sobre los privilegios de la vaca: que vivía en un área espaciosa de la finca con aire acondicionado y música clásica tocando 24 horas. Hernández y otros vaqueros a su cargo, aseguraron en La Vaca de Mármol, que estos eran solo rumores. Lo que era cierto, según cuentan, es que no le gustaba comer lo mismo todos los días (a veces comía pasto, otros días naranjas y toronjas) y que tenía un pequeño radio portátil que tocaba la música tropical que emitía Radio Caribe. Aquellos lujos no atenuaron su carácter agresivo, por lo que ordeñarla resultaba en golpes y heridas permanentes para su cuidador.
Los últimos años de Ubre Blanca no fueron fáciles. La vaca enfermó de cáncer en 1983 y pasó sus últimos dos años en El Centro Nacional de Salud Agropecuaria (Censa) en las afueras de La Habana. Fue disecada y actualmente se exhibe en las oficinas de Censa en una estructura de cristal. A petición de Fidel Castro, una estatua se erigió en su honor en Isla de la Juventud, su lugar de origen.
En 2002, el gobierno cubano anunció un proyecto para clonar a Ubre Blanca, ya que en el Censa se había recogido su material genético antes de morir. Desde 1987, este se había convertido en un plan prioritario para Fidel Castro, según un artículo de Wall Street Journal. El proyecto significaba una esperanza para recuperarse de una crisis en la producción lechera y de carne por la que pasaba Cuba en ese momento. “Esperemos que Steven Spielberg haya sido profético con su película Jurassic Park”, dijo uno de los científicos a cargo de la investigación al diario estadounidense. Este objetivo aún no se ha cumplido.