Antes era el bar, la plaza del pueblo y el instituto. Ahora sigue siendo lo mismo, y el móvil. En los últimos años ha cambiado la forma en que conocemos a nuestras parejas. En 1995 nació match.com, una de las primeras páginas webs de contactos y que ahora se llama Meetic. Y en 2012 nació Tinder, una aplicación que ha logrado que la expresión “hacer match” se popularice hasta incorporarse al lenguaje amoroso con toda normalidad. Sin embargo, no todo el mundo hace match a través de una pantalla. Muchas personas se siguen emparejando por vías tradicionales.
Hace años, lo más normal era encontrar a tu pareja en lugares como la universidad o la oficina. Las aplicaciones y webs para ligar han ampliado nuestro radio para conocer gente. Es más, lo estudios sobres aplicaciones para ligar nos han enseñado que favorecen la formación de parejas interraciales, ya que conectan a personas que no interactuarían sin estos servicios.
Hemos salido a las calles de Madrid para preguntar a 20 personas cómo conocieron a sus parejas. Haya sido por internet o de una manera más tradicional, estas son sus respuestas, en 20 palabras.