Hace ocho años, en Zinacantán (Chiapas), cuatro amigos buscaban un nombre para su banda de rock. Cuando alguien mencionó la palabra Lumaltok no dudaron ni un segundo en adoptarla. “Significa neblina en tsotsil (lengua mayense que se habla en Los Altos de Chiapas) y en Zinacantán que es nuestra tierra, siempre hay neblina. Embonaba perfecto”, relata Zanate , vocalista y guitarrista de la agrupación a Verne vía telefónica.
“Desde pequeños nos dimos cuenta de que, además de ir al campo y sembrar maíz, necesitábamos hacer algo más profundo. Algo que le diera satisfacción a nuestras almas. El día que escogimos nuestro nombre supimos que era momento de hacerlo y que la música sería el medio”, agrega Zanate.
Fue así como desde 2011, Zanate, Moisés Pérez, Sergio Omar Pérez Méndez y Juan Diego Pérez comenzaron a hacer rock. Su música tiene dos características distintivas: todos sus temas estaban interpretados en tsotsil y cada vez que subían al escenario usaban el colera, traje tradicional de Zinacantán. “Lo hacemos para llevar siempre con nosotros una parte de nuestro pueblo”, dice Zanate. “Queremos compartirlo con el mundo para que cuando toquemos, ellos también se sientan parte de ese lugar. Es importante sentirnos libres de ser quienes somos. Nunca debes avergonzarte de tus raíces”.
“Un zinacanteco no se enamora”
Cuando se le pregunta a Zanate si la aseveración "No tocamos temas de amor porque un zinanteco no se enamora" que él dice al principio del video de Bats'i Rock (Rock Verdadero) es verdadera solo se ríe. “En realidad la vida aquí es muy dura. Muchas veces, como muchos músicos independientes no tenemos tiempo ni para el amor”, dice. El vocalista de 27 años explica que la mayoría de las canciones mexicanas hablan de lo mismo: amor y desamor.
Sin embargo, desde su punto de vista, hay mucho más de qué hablar. “Por qué no hablar de cómo cae la lluvia en el bosque, cómo se siente el aire en tu rostro, de cómo es caminar en un sendero o del olor de la hierba. Nosotros hablamos de eso, pero también de feminicidio, violencia y, claro, discriminación porque son cosas que vivimos todos los días. No es que no creamos en el amor, aunque seamos roqueros lo necesitamos, pero por ahora, el amor a la música es lo que nos mueve todos los días”, agrega Zanate.
Con dos discos grabados, presentaciones en festivales como el Ollin Kan, el Vive Latino y el Cervantino, Lumaltok está listo para presentar su tercer álbum Vukub ja'vil ta Lumaltok (Siete años entre la Neblina) el próximo sábado 18 de julio en San Cristóbal de las Casas. El material, que ya está disponible en iTunes, fue producido por Charamusca, productora de Javier Velasco Gaona y Leonardo Añorve, exbajista del grupo Los Estrambóticos.
“Nuestra productora nació este 2016 y busca darle promoción al talento artístico indígena, especialmente el de Chiapas, de donde soy originario”, platica a Verne Velasco Gaona, productor de Lumaltok. “Me considero muy nacionalista. Lo que busco produciendo a bandas como esta es defender mi patrimonio. Si la gente washa washea en inglés, también pueden hacerlo en tsotsil. No hay un rock tsotsil como género. El rock es rock. Quiero que el público descubra un artista, una banda y qué mejor que sea indígena”.
En México, el tsotsil es la quinta lengua indígena más hablada de acuerdo con el último censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Hasta el 2015 más de 480.000 personas hablan esta lengua en nuestro país.