Aquellos que hayan visto la final de Masterchef en Televisión Española este miércoles y hayan madrugado este jueves habrán bostezado más de la cuenta. El último programa de la temporada se alargó hasta las 2.00. Aunque es las finales de este tipo de concursos se suelen extender más allá del horario habitual (en su caso, a medianoche), el programa ha generado críticas de algunos de sus espectadores por su horario, y no es la primera vez que ocurre con este espacio y con su versión junior.
Muchos usuarios de Twitter expresaron su descontento por lo tarde que terminó la final, que coronó a Jorge como ganador. El programa ya venía marcado por la polémica por unas imágenes promocionales que dejaban intuir quién ganaría el concurso. A medianoche, cuando quedó claro que restaba mucho programa por delante, los tuiteros empezaron a quejarse.
Según avanzaban el programa y el reloj, se volvían a dar las quejas habituales por el horario tardío. Muchos criticaban que esta práctica proceda de una cadena pública, que además cambió el día de emisión (el programa se venía emitiendo los domingos)
Y otros acabaron pasándose al humor para mentalizarse ante los bostezos del día siguiente.
Esta es una queja habitual entre los espectadores españoles cuando un programa se estira hasta altas horas de la madrugada. Pasó en enero en la final de Masterchef Junior, con el añadido de que es un programa muy seguido por niños, y también se dio tras el debate electoral de los cuatro principales candidatos en diciembre de 2016. Aquel debate terminó a las 00:25 horas. La Junta Electoral reclamó a Televisión Española que no se diera el mismo horario en el debate previo a los comicios de junio.
El programa del Defensor del Espectador, RTVE responde, abordó hace justo un año las quejas sobre la emisión de la final de la anterior temporada de MasterChef Junior. La directora del área de Entretenimiento del Ente público, Toñi Prieto, insistió entonces en mantener el horario del espacio "porque los niños pueden verlo al día siguiente" en la web y en resosiciones.
Como tantos otros hábitos españoles, el prime time tiene lugar en nuestro país más tarde que en el resto de Europa, condicionado por el huso horario en el que se rige. En España, el horario de máxima audiencia televisiva se sitúa entre las 21.00 y las 00.00, con programas que incluso acaban después de las 00.30. En el resto de Europa, el prime time arranca a las 20.00 y rara vez se extiende más allá de las 23.00.
“Es verdad que tenemos horarios muy dilatados y que la gente se sienta tarde a ver la televisión. Los programadores intentan adecuarse al máximo a los horarios mayoritarios y eso consolida esos horarios. Es una especie de círculo vicioso”, aseguraba a Verne Alejandro Perales, presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC), en este artículo sobre horarios televisivos.
“Aquellas cadenas que sean pioneras en adelantar el horario probablemente se verán penalizadas en datos de audiencia al principio. Por eso creemos que la televisión pública tiene que ser la que dé ejemplo, porque no dependen de la publicidad. Sobre todo cuando hablamos de programas que tienen interés para los más pequeños y que acaban muy tarde”, añadía.
Los extraños horarios de España
España no está en el huso horario que nos corresponde geográficamente y en la actividad cotidiana -desde los horarios de comidas a los laborales- llevamos dos horas de retraso respecto al resto de países de Europa, como explicamos aquí al hilo de este gráfico:
"No siempre tuvimos estos horarios", comentó a Verne la doctora en Psicología Social Sara Berbel en el artículo sobre ese gráfico. "Durante la época de industrialización los países europeos había adoptado unas jornadas laborales larguísimas y muy rígidas, pero tras la guerra todos vieron que esto no era factible y que debían cambiarlo", señala Berbel, "nuestro país entró entonces en una dictadura y todo ese proceso modernizador se paralizó. Es por ello por lo que seguimos teniendo los horarios menos flexibles de Europa".