La historia detrás de la oferta de trabajo para ser operador de cámara sin cobrar

"He leído esta oferta de trabajo y no me he podido resistir a contestarla". El tuit enviado por el usuario JorgeT, un operador de cámara y editor de vídeo según su descripción en Twitter, se acompaña de una doble imagen. En un lado, los detalles para un puesto para la revista Inmediares Magazine como operador de cámara en el que se requiere equipo propio y se especifica que no es remunerado. En el otro, la respuesta de este indignado: "No quería perder la oportunidad de cagarme en vuestra puta madre. Gracias a gente como vosotros nuestro trabajo está donde está. [...] Espero que ningún imbécil pique y trabaje con vosotros". El mensaje consiguió que su autor se conviertiera el martes en tendencia en Twitter en España al ser retuiteado más de 6.000 veces en las primeras 24 horas.

La primera consecuencia de esta denuncia digital ha sido la eliminación de la oferta en la web Filmutea, dedicada a poner en contacto a empresas y candidatos del sector audiovisual. A esta plataforma habían acudido los fundadores de Inmediares Magazine, la revista que ofertaba el puesto de operador. Una publicación cultural creada por los estudiantes de Escola Massana de Bellas Artes en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona. "Somos una entidad sin ánimo de lucro, no ofrecíamos un puesto de trabajo, sino una colaboración", explican a Verne por email. "Tras la confusión en Twitter hemos decidido eliminarla".

"Encontré la oferta en el perfil de Twitter de otra chica", explica Jorge al otro lado del teléfono. "Busque en internet información de la empresa pero no encontré muchos detalles". El cámara decidió contestar porque dice estar "harto" de que en el sector audiovisual se ofrezcan trabajos gratis y además se solicite equipo propio que "puede llegar a costar más de 10.000 euros".

Un día después de que publicara el tuit, Núria F. Rius, responsable de la publicación estudiantil ha publicado en la red social una nota de disculpas por lo que considera un malentendido. "He visto que me ha arrobado por Twitter, pero no voy a contestar. Sus alumnos publicaron la oferta sin su consentimiento y en una web de empleo", asegura Jorge. "En otra ocasión, tras publicar un mensaje similar les trolearon tanto que sí me disculpé".

No es la primera vez que este cámara denuncia en Twitter este tipo de ofertas no remuneradas. Cuenta con más de 8.000 seguidores, muchos de los cuales al ver esta publicación le han empezado a enviar otras similares. Tal vez por eso, un día después de publicar su locuaz respuesta se congratulaba de la repercusión que ha llegado hasta el agregador de noticias Menéame.

Otras (precarias) ofertas

- En el sector de la comunicación, Twitter se ha convertido en el altavoz para denunciar este tipo de prácticas. En 2011, la periodista Azahara Cano recibió una oferta de trabajo para cobrar 75 céntimos por cada pieza de 800 palabras. La denuncia fue recogida por la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) y se inició la campaña en redes #gratisnotrabajo. Miles de usuarios comenzaron a compartir en sus perfiles este tipo de anuncios. "Queremos investigar todas estas ofertas que rayan en la ignominia para denunciarlas públicamente", dijo la presidenta del organismo, Carmen del Riego. El hashtag se extendió por 15 países y la APM anunció la creación de un Observatorio para Ofertas Laborales Precarias en el que se irían recogiendo y estudiando estos casos.

- Carlos se presentó en 2013 para un puesto en Bloom Estudio, una empresa dedicada al diseño y lanzamiento de páginas webs que buscaba una persona para realizar "prácticas sin remuneración para ver la valía y valorar lo que aporta al equipo". Este joven catalán, que según contó a Yahoo! (medio a través del que se difundió su historia) encadenaba cuatro convenios sin cotizar un euro, decidió plantar cara a la compañía y su propuesta. "Me niego rotundamente a trabajar gratis y menos teniendo que pagar una habitación", respondió por email iniciando una larga cadena de reproches. "Lo siento, pero no me vas a vender la moto. Puedes adornarlo todo lo que tú quieras y escribir una frase de siete líneas, que no me la cuelas (...) Llevo cuatro convenios firmados, tres sin cobrar y uno cobrando. SIEMPRE es la misma historia. "Te damos la oportunidad de lanzar tu carrera en una agencia joven, con un equipo dinámico" bla, bla, bla". La empresa se defendió argumentado que no ofrecían un puesto de trabajo remunerado sino unas prácticas y que estaban dispuestos a valorar el coste del traslado a sus oficinas.

- "Busco a persona necesitada que me ayude como vigilante y mantenimiento de pequeña empresa dedicada al ramo del automóvil a cambio de alojamiento y manutención. Más adelante ya hablaríamos de ayuda económica, incluso sueldo". Esta oferta de un anunciante de Ciudad Real apareció en la sección de empleo de un periódico según recogió La Vanguardia en un reportaje que recopilaba este tipo de anuncios.

El diario identificaba distintas modalidades de empleo precario destacando los trabajos disfrazados de voluntariado: "Estoy buscando a joven sencillo y disponible para colaboración en mantenimiento de finca de Barcelona. Preciso un ayudante de carácter familiar con unas condiciones como aprendiz voluntario. Lo máximo que puedo ofrecer es formación y alojamiento gratis en plan compañeros. Yo también he sido voluntario", reza el anuncio.

- En la administración pública también se hacen este tipo de ofertas. Desde abril de 2013, el Departamento de Comunicación con los Ciudadanos de la Moncloa buscaba estudiantes de Derecho, Periodismo y Relaciones Públicas para trabajar cuatro meses (con posibilidad de prórroga) cinco horas al día sin remunerar. El anuncio se difundió por redes sociales y Moncloa se justificó alegando que "solo podían pagar a los funcionarios", según recogieron varios medio.

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