Del 1 al 8 de noviembre, 25 personas se apuntaron en el Centro de transfusión, tejidos y células del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva para donar médula. Del 8 al 16, se apuntaron 417. Cuando le damos el dato a Marcos Rosa, enfermo de leucemia que ha conseguido este acelerón en el registro de donaciones, alucina.
-¿En serio? Madre mía, vaya pasada. Menuda alegría.
Nos atiende por teléfono con una alegría que impresiona. "Estas cosas hay que afrontarlas con la mejor actitud posible", dice. Es la tercera vez que diagnostican leucemia a este onubense de 26 años. La primera vez fue con 17 y recayó con 23. Le ingresaron el 6 de noviembre, cuando se hizo esta foto.
"Van mis amigos y, para animarme, se plantan en el hospital con esas pintas. Son pijamas de estos del Primark", dice entre risas. Subió la foto a Facebook, donde lleva más de 640 interacciones, muchas más de las habituales, y a Instagram. Desde entonces, sus imágenes y vídeos en esta red social acumulan mucha más actividad. "Entonces pensé que tenía que aprovechar toda esa atención para algo importante. Me centré en pedir a la gente que se apunte al registro de donantes", indica.
Ese es el principal mensaje que transmite en la entrevista que terminó de lanzarle a la fama en Huelva. El diario local Viva Huelva le entrevistó y colocó su foto en portada, posando como lo hacía Pablo Ráez: flexionando el brazo (💪). "A partir de entonces me empezaron a llamar de muchísimos medios locales. Aproveché toda esa ola para insistir en la importancia de que la gente se apunte para donar. Quería conseguir algo grande", añade.
Y lo consiguió, según nos confirma la responsable del Centro de transfusión, tejidos y células, María Dolores Fernández. Un empleado del hospital nos dijo que varios días han sido "una locura" de gente acudiendo para donar. "Una locura no", dice Fernández, "pero es verdad que ha venido muchísima más gente que normalmente. Hemos podido atender a todo el mundo. Todo ha sido a raíz de que Marcos hiciera el llamamiento".
Los anteriores tratamientos de Rosa consistieron en quimioterapia. Esta vez, los médicos aconsejan que siga con quimioterapia menos agresiva, pero inciden en la necesidad de encontrar un donante de médula. "Quizá muchos de los que han acudido a donar creen que lo hacían para mí. A saber, pero lo normal es que no sea el caso", explica. Se ha hecho fotos con muchos de ellos.
Donar médula no es como donar sangre. La compatibilidad entre personas es muy baja, de ahí que sea tan difícil encontrar un donante compatible. Esa es la razón por la que un aumento sustancial de los donantes multiplica las posibilidades de encontrar la médula adecuada para un paciente. Al acudir a apuntarte (como hicimos nosotros en enero), te hacen un análisis de sangre y almacenan tus datos. Pueden pasar años hasta que aparezca un paciente que sea compatible.
"Ahora puede que estemos muy sensibilizados, pero ¿seguiremos igual en cinco o diez años? Hay que mantener ese compromiso", añade Fernández. En caso de que haya compatibilidad, se realiza una nueva extracción de sangre para confirmar que paciente y donante son disponibles. Existen dos métodos de extracción: de sangre periférica (el más común, con extracciones de sangre) y de médula ósea.
Esta no tiene nada que ver con la médula espinal: es un tejido que se encuentra en el interior de los huesos. La extracción necesaria para la donación se realiza mediante punciones en las crestas ilíacas, en la parte superior de la pelvis. Este proceso es algo más complejo, se realiza con anestesia y con un ingreso hospitalario de 24 horas. Juan Antonio Marín, el donante que contó en Verne su experiencia, se sometió a este procedimiento, y tampoco fue para tanto. Lo cuenta aquí. "De momento no hay un gran cambio anual respecto a las donaciones del año pasado en Huelva, pero este tipo de gestos son fundamentales", dice la responsable del centro de donaciones.
"No te imaginas lo contento que estoy"
"Todo esto es impresionante. Conseguir que la gente se implique para una causa tan importante es una maravilla. Y todo por una foto...", indica Rosa. "Publiqué la primera imagen para que mis amigos se enterasen de que me habían vuelto a ingresar, pero no esperaba algo así. Espero estar ayudando a personas que estén pasando por lo mismo", añade.
Nos atiende en uno de los días que no le toca estar ingresado. "Me paso dos semanas fuera y una ingresado en el hospital recibiendo quimio. Y a esperar que aparezca un donante". Entre tanto, asegura que su familia "tiene el mismo ánimo que yo; somos así. Es una virtud de mi familia. No se ve un ambiente de enfermedad. Y todo esto ayuda. No te imaginas lo contento que estoy".
Rosa sigue la estela de otros pacientes que lograron aumentar las donaciones de médula a partir de las redes sociales. El ejemplo más representativo es el de Pablo Ráez, que lanzó el reto #unmillóndedonantes. Concienció a muchos, especialmente en su provincia, Málaga, donde en los últimos cuatro meses de 2016 las donaciones de médula se multiplicaron en un 1.400%. Según los últimos datos de la Organización Nacional de Transplantes (2016), en España hay más de 250.000 donantes de médula. El objetivo del Plan Nacional de Médula es llegar a 400.000 en 2020.
Puedes encontrar toda la información necesaria sobre donación de médula en la página web de la Fundación Carreras.
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