El momento en el que descubres que eres el objeto de un viral debe ser, como mínimo, especial. Al Mago More le pasó el jueves: este cómico y conferenciante abulense, colaborador de programas como La noche de José Mota, estaba en una conferencia impartida a una gran empresa. “Uno de los jefes”, explica el humorista a Verne, “se acerca y dice ‘mira, un vídeo tuyo. Me lo ha mandado mi hijo por Whatsapp. Desde Londres’. Desde entonces me ha llegado por cien sitios”. El vídeo en cuestión, que puedes ver arriba, es un fragmento de este, que contiene la charla completa:
La cosa tiene gracia, y no (que también) porque sea un chiste. Primero, porque More no es el autor de la chanza. Aunque como él "no lo cuenta nadie", afirma medio en serio, medio en broma, es un chiste del acervo popular, sin dueño reconocido. De entre todo el material original que este conferenciante utiliza en sus charlas, se populariza un chiste viejuno de un speech que, además, dio hace ya tres años: “esa conferencia formaba parte del foro Euskadi Emprende”, explica. “Tuvo lugar en septiembre de 2012”.
Segundo, porque su nombre –el real es José Luis Izquierdo- no aparece por ninguna parte. “Me da rabia porque, a menos que me conozcan de antemano, es imposible saber quién soy viendo el vídeo. Voy a empezar a poner mi nombre en las conferencias por todas partes”, bromea.
More no sabe quién eligió primero ese chiste para compartirlo, ni cómo se originó el contagio, si cuáles son exactamente sus dimensiones. El conferenciante, que acostumbra a trabajar con redes, explica a Verne que el problema de Whatsapp es que “no tiene trazabilidad, no se puede comprobar de dónde ha salido un viral ni el número de compartidos que tiene”. El alcance, sin embargo, se intuye alto. Ayer ya lo reconocieron “en un restaurante, como ‘el del vídeo de los indios’”.
“Es irónico”, reconoce More, “porque nosotros trabajamos haciendo vídeos y dar con la tecla para que algo se convierta en viral es complicadísimo, a menos que seas El Rubius o algo así”. ¿Por qué éste vídeo se ha convertido entonces, sin pretenderlo, en el que no falta en ningún smartphone este fin de semana? Según More porque, aunque el chiste sea viejo, nada ha cambiado: “la broma tiene muchos años, pero las empresas siguen llenas de indios”.
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