7 juegos matemáticos para el coche

Ejercita tu mente durante las caravanas

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Hay fechas en las que tomarse vacaciones implica acabar en un atasco. Tal vez seas el pasajero de las plazas de atrás de un coche, o te toque escuchar hasta la extenuación el famoso “¿falta mucho?”. En cualquiera de estos casos te vamos a aconsejar cómo desarrollar tu mente sin bajarte del vehículo. No es para que te diviertas, es para que sobrevivas.

1. Juegos con matrículas

Mi favorito es en el que hay que construir una igualdad, se permiten “todas” las operaciones y las cifras se toman sueltas, así por ejemplo 4357 daría para 4x3=5+7. No es preciso conservar el orden, aunque yo siempre le he tenido un especial cariño a las matrículas que puedo resolver sin cambiar números de lugar. Mi primer coche era 2623 y lo resolvía con un 2+6=2^3 (el circunflejo significa elevado).

En realidad, si no importa el orden, no hay tantas matrículas diferentes (¿cuántas habrá?) y algunas, como las que tengan dos ceros, ya están resueltas, por ejemplo 0203 (0x2=0x3).

Con los dígitos de las matrículas se pueden hacer muchas cuentas, como sumarlos todos y si sale más de diez volverlos a sumar y si sale más de diez… se llega así a la raíz digital, y sus curiosas propiedades.

Pero no nos pongamos cerrados con las cifras: también se puede jugar con las letras, formando palabras que las utilicen o frases con palabras que empiecen por esas letras.

Y si vas por una carretera solitaria y no hay ninguna placa a la vista te puedes preguntar ¿cuánto suman las matrículas que no tienen cifras repetidas? Por simplificar pongamos solo las que llevan las mismas letras, digamos GTF, “Grecia Toma Feta”. ¿Cuánto sumarán todas las matrículas con las letras FRM, “FeRMín”? O estimando, ¿cuánto sumarán todas las matrículas de los coches que circulan por España? Dejo en manos del lector de otros países adaptar el problema al parque móvil local).

2. Bingo de viaje

Es el "veo veo" de toda la vida -y que tantos viajes nos ha salvado a los que nos resistimos a poner un DVD en el coche-, pero un poco más sofisticado, así que precisa de preparación previa. Aunque siempre puedes imprimirte esta carpeta que ya viene preparada y es ideal para viajar con niños de 5 a 8 años.

Ejemplo de bingo de carretera, elaborado por Playdough to Plato

Nos preparamos lo que esperamos ver en nuestro viaje y confeccionamos una lista (señales de tráfico, semáforos, animales, cactus, barcos, trenes, aviones…). Con esa lista confeccionamos varios cartones con los que vamos tachando los objetos según se vayan viendo (si juegan varios jugadores se pueden preparar distintos cartones).

3. Estadísticas

Podemos preparar una tabla para cualquier cosa, por ejemplo colores de coches, marcas, señales de tráfico o primera letra de pueblo o de señal de tráfico. Vamos a tomar un registro de cada vehículo que veamos para contar cuál se repite más, de cuál apenas hay ninguno, etcétera.

4. Juegos de cartas y percepción visual

Como Dobble, que es un juego delicioso de percepción visual al que -si lo miras matemáticamente- le faltan dos cartas. O como el SET, un genial juego de lógica que me tiene enganchado desde hace tiempo y que consiste en localizar tres cartas que para cada una de sus características sean o todas iguales o todas diferentes. Para entrenarte, puedes jugar online.

Diferente forma, fondo, color y número, totalmente diferentes, un SET. Joseángel Murcia

5. Edificios

Si eres de los que añoran la ciudad, este es tu puzle. Parte de una casilla de 4x4 en la que hay que ir colocando edificios de 1, 2, 3 y 4 alturas (si te resulta muy fácil puedes llevarlo a nivel 5x5). En cada calle solo puede haber un edificio de cada altura. Al principio de la calle hay un número que te dice cuántos edificios puedes ver desde esa posición (los altos tapan a los más bajos). El que tengo lo construí con bloques encajables, pero puedes hacerlo con piezas de Lego o jugar online en este enlace: flash - no flash.

Joseángel Murcia

6. Cubo Soma

Con los mismos bloques encajables de los edificios puedes preguntarte -como hizo Piet Hein durante una conferencia de Heisenberg- "¿cuántas formas distintas puedo construir con cuatro cubitos (tetracubos)? En realidad no son tantas, y si excluimos los palitroques y los cuadrados (tetracubos regulares) y añadimos el único tricubo irregular (que tiene forma de r) resulta que hay seis tetracubos: L (que es la misma que la J), T, N, las dos torres y el “trípode”.

Curiosamente, esos 3 + 6 x 4 cubitos suman un total de 27 cubos, malo ha de ser que no se pueda formar un cubo 3x3x3. Pues sí se puede y John Conway -el matemático más carismático del mundo- descubrió y describió que se puede resolver de 240 maneras distintas. Así que el reto no es solo montar cubos, sino comprobar que son distintos y acercarse, aunque sea a distancia, a esos 240 diferentes.

Joseángel Murcia

7. Rush Hour

Si el atasco va para rato, lo mejor será jugar al Rush Hour. El objetivo es sacar el coche rojo del jaleo en el que se encuentra, moviendo coches adelante y atrás. Es un puzle ya clásico, pero muy divertido y lo pueden jugar los más pequeños (a partir de 4 años). Lo hay con coches de plástico y tarjetas de retos o directamente en app para iOS (merece la pena pagar 2,99€ aunque no nos guste pagar por las apps) o para android (en alguna de esas versiones que no son la original pero se le parecen vagamente y son “gratuitas” a cambio de publicidad).

Bonus

Siempre podremos jugar a las palabras encadenadas: decir una palabra que empiece por la última sílaba de la que ha dicho el anterior jugador. No es muy matemático, pero en Japón -donde lo llaman Shiritori- han descubierto que se puede jugar a la vez que se realizan operaciones matemáticas. En el vídeo las niñas juegan a Anzan, sumando los 30 números de tres dígitos que aparecen en el monitor a razón de uno cada 0,67 segundos, al mismo tiempo que juegan con las palabras.

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