La queja viral por no poder entrar con su bebé lactante al Mobile World Congress

Francisco Hernández Marcos y Esther Yuste acudieron por motivos laborales al Mobile World Congress (MWC). Lo hacían con su hija Marina, de cinco meses, pero no pudieron acceder al recinto de la Fira de Barcelona al encontrarse con un menor. Poco importó que la niña estuviera en edad lactante, Francisco fue expulsado del recinto "con malos modos" y su esposa acusada de "poco profesional", denuncia ahora él mismo desde las redes sociales y su blog, cuyo post se ha compartido hasta el momento 18.000 veces en Facebook.

El pasado jueves, Esther Yuste asistía al MWC, el mayor congreso mundial de telefonía, para acudir a varias reuniones profesionales. Al intentar acceder al edificio se encontró con una rotunda negativa. La entrada al evento con niños estaba prohibida y el hecho de que su hija Marina estuviera en edad lactante no cambiaba nada, le informaron en la puerta de acceso.

“Cuando comentó que no acudía allí con la niña por capricho, sino por intentar conciliar su vida familiar y laboral, una supervisora le llegó a decir que su comportamiento era poco profesional”, explica a Verne por teléfono Francisco Hernández Marcos, quien ha colgado el perfil laboral de su esposa junto al escrito con el que denuncia lo ocurrido. La GSMA es la asociación que agrupa la industria móvil mundial que impulsa el evento y la encargada de gestionar los accesos al MWC.

Aunque la web del MWC explica que era necesario solicitar a través del correo electrónico y por adelantado el acceso con menores de 16 años, el matrimonio asegura que nunca les informaron sobre esta normativa cuando les negaron el acceso y se queja por el trato recibido. “Ella se sintió dolida por ese comentario y no insistió, así que me llamó por teléfono”, comenta a Verne Marcos, quien acudió a cuidar de su hija al acabar su reunión para que su esposa pudiera atender la suya.

Con su acreditación, decidió esperar sentado en un banco al aire libre, en la entrada del recinto. Poco después una mujer de la organización le dijo que tampoco podía quedarse allí con el bebé, en un tono que él no consideró amable, como puede leerse en la publicación de  su blog, que ya ha superado las 100.000 visitas, asegura Marcos.

“No deseaba montar follón así que no me resistí. Ahora me arrepiento y me siento culpable de no haber informado a los mossos d’escuadra de lo que estaba ocurriendo, por eso he decidido contarlo”, explica Marcos, quien comenzó a publicitar su queja a través de sus redes sociales. Desde ellas ha enviado su mensaje a gran parte de los patrocinadores del MWC, pero no tiene intención de contactar directamente con los organizadores del congreso ni de presentar una reclamación por escrito, comenta.

En los últimos días, su queja, que lleva el hashtag #MarinaEntraAlCongreso, ha conseguido el apoyo a través de Twitter de asociaciones como Malasmadres y de la periodista Carme Chaparro. En su mensaje se dirige a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, quien ha pulsado la opción "me gusta" en el mismo después de haber mostrado su interés en Twitter por el traslado del MWC de Barcelona a Madrid.

"Seguimos investigando este incidente, pero nos gustaría pedir disculpas a ambos por los problemas ocurridos la semana pasada. Aunque se trate de un evento orientado al ámbito de los negocios, somos conscientes de que algunas familias pueden necesitar apoyo durante el transcurso del mismo. Para enfocarnos en ello, solemos tener un programa paralelo llamado Mobile Explorers Club dedicado a niños de entre 8 y 15 años y ofrecemos un servicio adicional de cuidado infantil y una sala de lactancia", explica GSMA a Verne a través del correo electrónico.

También confirma la normativa de avisar con antelación y por escrito y afirma: "No tenemos constancia de que el señor Herández Marcos realizara la petición previa necesaria para obtener el permiso que le permitiera acceder al recinto con un bebé. De lo contrario, hubiéramos analizado la situación de un modo adecuado".

El día anterior a lo ocurrido, el matrimonio intentaba acceder con su bebé al 4YFN, un congreso paralelo al MWC dedicado a start-ups e inversores y también celebrado en la Fira de Barcelona. Se lo negaron tres veces, pero ante la insistencia de la pareja, un supervisor del evento les permitió la entrada, disculpándose por lo que estaba pasando. “Hay veces en la vida que, más que seguir las reglas, hay que guiarse por el sentido común. Pasad“, relata Marcos que comentó el supervisor que los atendió finalmente. “Nos invitó a acceder a una zona restringida en la que Esther pudiera amamantar a Marina, pero otras personas no pudieron entrar al congreso”, comenta. Es el caso de Caroline Ragot, quien publica en Twitter una imagen con su hija a las puertas del 4YFN, al que no había podido acceder.

María Berruezo pasó tres días en el 4YFN promocionando su Lactapp, una aplicación para móviles dedicada a la lactancia. En ese tiempo, no vio a ninguna mujer con su bebé en brazos entre los asistentes, cuenta a Verne. Al pasar una cuarta jornada en MWC es cuando encontró una sala de lactancia vacía e hizo varias fotografías. "En principio publicamos la imagen alegrándonos por el hecho de que existiera. Luego descubrimos casos como el de Francisco y el de Caroline y nos dimos cuenta de que, probablemente, es un gesto vacío para quedar bien", comenta en conversación telefónica. Por eso, decidieron publicar en Facebook incluyen una imagen de la que denominan "la sala de lactancia más inútil del mundo".

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