Dom tiene 7 años y una cuenta en Instagram a medias con su padre, Tom Curtis, que trabaja en una agencia de medios de Londres. Desde el año pasado, publican en @thingsIhavedrawn (cosas que he dibujado) las obras de arte del pequeño, que su padre recrea digitalmente para mostrar cómo sería la vida real si su hijo la retratara con fidelidad. Es decir, es como si Curtis intentara sacar una foto a lo que ve su hijo.
“Siempre me ha parecido fascinante y extraño cómo los niños ven las cosas", explica Curtis a Verne. Le encanta ver cómo los dibujos de su hijo “son sencillos y no hay ninguna preocupación por si salen muy bien. Así es cómo debe ser la creatividad de un niño”. Esta creatividad ha llamado recientemente la atención de público y medios de comunicación: en solo esta semana ha pasado de menos de 10.000 a más de 50.000 seguidores.
Pero lo que más le ha gustado a Curtis de esta experiencia no son tanto los seguidores como “pasar tiempo con Dom trabajando en nuevos dibujos y viendo cómo su creatividad y su imaginación crecen”. Y no solo con Dom, también con Alistair, su hermano pequeño (5 años), que ya ha contribuido con algún dibujo: “A medida que se haga mayor, creo que hará aún más”. Unos, con papel y lápiz, y el otro, con Photoshop: "Estudié arte en la universidad -añade Curtis-. Debería usarlo mejor, la verdad".
Curtis no conocía trabajos similares cuando empezó su proyecto con Dom, pero sí ha visto algunos desde entonces, como el de este artista que recreó de forma similar sus propias ilustraciones de cuando era niño. También comenta que “hay muchos peluches hechos a partir de dibujos de niños que son geniales”.
El propio Dom escoge los temas: “A veces le sugiero que dibuje algo que no hayamos hecho antes, pero habitualmente trabajo con lo que ha decidido dibujar. Tendemos a hacer cosas reales que ve a su alrededor”, aunque tienen previsto comenzar a publicar “monstruos y naves espaciales”. Dom ya ha hecho los dibujos. Solo falta que su padre encuentre algo de tiempo para encargarse de las fotos.
El dibujo favorito de Curtis es el del gato de la familia, que además fue el primero que subieron a Instagram. “Es un poco tosco -dice-, pero aún me hace sonreír. A Dom le gusta su dinosaurio volador, pero creo que eso es porque hemos introducido algo de humor escatológico”.
Cada imagen va acompañada de un pequeño poema parecido al que podríamos encontrar en un libro para niños. ¿Le gustaría ver estas creaciones pubicadas? “Eso sería muy emocionante para Dom. Ha crecido rodeado de un montón de libros e ilustraciones brillantes. Creo que los niños se benefician muchísimo de la exposición a imágenes y literatura creativa”.
* También puedes seguirnos en Instagram y Flipboard. ¡No te pierdas lo mejor de Verne!