El primer premio de la ceremonia de los Oscar 2017 ha marcado también un hito en la historia de los galardones de la Academia de Hollywood: Mahershala Ali es el primer actor musulmán en ganar una estatuilla dorada. Ha logrado el galardón en la categoría de mejor intérprete masculino de reparto por su trabajo en Moonlight, centrada en el rechazo que enfrenta un joven afroamericano por su condición de homosexual y que se ha llevado el premio a la Mejor Película, tras unos minutos de confusión en los que el gran premio de la noche fue para La La Land. [Consulta aquí la lista completa de ganadores de los Oscar 2017]
Aunque el actor, que interpreta a la figura paterna del protagonista, ha decidido no hacer ninguna reivindicación al respecto durante su discurso de agradecimiento, sí hizo referencia a Donald Trump y su veto a inmigrantes de varios países musulmanes cuando recibió el premio del Sindicato de Actores de Cine (SAG Awards) en la misma categoría a finales del mes de enero.
"Soy musulmán", dijo entonces el actor, que se convirtió al Islam hace 17 años tras visitar una mezquita con la que ahora es su esposa. Su madre, a pesar de no compartir su misma religión, le quiere más que antes, aseguró con el galardón en su mano.
"Creo que lo que aprendido trabajando en Moonlight es lo que ocurre cuando se persigue a la gente. Esas personas suelen encerrarse en sí mismas. Y lo que agradecía de tener la oportunidad de interpretar a este personaje es que es un caballero, que nota que un joven se está encerrando en sí mismo como resultado de la persecución de su comunidad y que aprovecha para elevarlo y decirle que importa y que no hay nada malo en él. Lo acepta y espero que nosotros hagamos un mejor trabajo al respecto", explicó entonces.
"Cuando nos quedamos atrapados en las minucias, en los detalles que nos hacen diferentes, creo que hay dos formas de ver esta situación: tenemos la oportunidad de ver la esencia de esa persona, las características por las que es única. Y tenemos la oportunidad de ir a la guerra por esa razón y decir: esa persona es diferente de mí y no me gusta. Así que batallemos".
El cineasta iraní de origen musulmán Asghar Farhadi ganó el Oscar a mejor película de habla no inglesa por Una separación (2012) y se ha negado este año a acudir a una ceremonia, en la que ha ganado un segundo galardón con El viajante, como protesta a las políticas del nuevo presidente estadounidense. Por su parte, la actriz Ellen Burstyn, quien se alzó con el premio a mejor actriz por Alicia no vive aquí (1975), se declara seguidora del sufismo, el aspecto místico del Islam.
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