“Nunca he sido valiente que digamos, pero es necesario, y ustedes lo harán, reconocer que se requiere un poco de valor, aunque sea un poquito, para usar el saco que me puse hoy”, dijo Fernando del Paso en 2015, al recibir el galardón Corazón de León en la Universidad de Guadalajara. En ese momento usaba una chaqueta a cuadros en tonos rojizos, negro y gris, una camisa blanca y una corbata plateada.
La indumentaria del autor de José Trigo era uno de sus distintivos. En abril de 2015, poco antes de que le fuera concedido el Premio Cervantes, Del Paso fue reconocido en el Palacio de Bellas Artes por sus 80 años de vida: en esa ocasión usaba un saco color carmín, una camisa de seda plateada y una corbata a rayas en esas tonalidades.
Varios autores mexicanos han hecho referencias a su ropa. Juan Villoro recuerda en su columna en EL PAÍS, que había heredado una camisa del poeta José Carlos Becerra y que usaba para escribir. “Ningún escritor mexicano se ha vestido con más colores”, ha dicho el ensayista con motivo del fallecimiento de Fernando del Paso, este miércoles.
Elena Poniatowska también puso énfasis en su vestimenta. “Como una inmensa flor, Fernando del Paso levanta su corola hacia los primeros rayos de la mañana y se renueva en la noche. ‘Se ve muy bien con una camisa color lavanda haciendo juego con un pantalón de casimir gris perla’, asegura su secretaria”, publicó Poniatowska en EL PAÍS en abril de 2016. “Los invitados a la sede diplomática mexicana se preguntaban cómo llegaría vestido el señor cónsul”, refiere Poniatowska sobre el puesto del escritor en el Consulado de México en París entre 1988 y 1991 en una carta publicada en el diario La Jornada en 2007.
Seda, cachemir y otros textiles finos eran sus favoritos al momento de escoger accesorios. Su hija, Paulina del Paso, hablaba de la afición de su padre en cuanto a moda. “Siempre (estaba) con una montaña de libros al lado de su cama, muchos lápices y cajones llenos de mascadas (bufandas) de colores y mancuernillas (gemelos) sin su par”, escribió en un artículo publicado en La Jornada en 2015.
En Twitter, un hilo que recopila algunos de sus vestimentas más memorables con humor. El mensaje ha sido compartido más de 1.200 veces tras las primeras seis horas de su publicación.
Voy a hacer un hilo con los mejores outfits de Del Paso, de su literatura ya hablarán los expertos.
— hwhwhwhwhwhwhwhw (@HWarpola) November 14, 2018
El primero son unos guantes gruesos estilo vagabundo para el frío, muy recomendables. pic.twitter.com/r4y37XH9E7
Saco psicodélico con una delicada corbata azul claro, este es de mis favoritos pic.twitter.com/5cDWywIWzQ
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Este hermoso saco estilo colcha también se ve buenísimo para el frío, la camisa blanca y la corbata plateada complementan a la perfección pic.twitter.com/RqCKHO8GYx
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Sin palabras, ni Tom Wolfe alcanzó esta elegancia. Aquí podría ser vampiro de Jim Jarmusch. El zapato, el guante, el pañuelo, todo es un hermoso espiral. pic.twitter.com/4RaHgLCIkm
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Combinación de verdes para una tarde de primavera. Los lentes ayudan muchísimo. pic.twitter.com/7MIt6lkvVJ
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Un clásico de Mónaco, perfecto para escribir en una sola tarde 10 cuartillas. pic.twitter.com/qfGfAHcJSX
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Saco brillante y camisa turquesa que hasta las Elenitas lo notarán. pic.twitter.com/xAf8uAviBe
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Impecable combinación. Ideal para tomar un tinto de verano antes de recibir el Premio Cervantes. pic.twitter.com/TZ4vmaoXq4
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Saco de otoño para cuando estás nostálgico. Perfecto para ir a eventos con funcionarios públicos. pic.twitter.com/SqIofNXwOe
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¡Al demonio la discreción! Si vas a recibir un premio que todos sepan quién lo ganó. pic.twitter.com/PjmTnd5cGw
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Morados y violetas para resaltar entre el muralismo mexicano. Todo es tan hermoso que hasta la barba se ve rosita. pic.twitter.com/kQieGy1kHZ
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¡BARROCOS HASTA LA MUERTE! pic.twitter.com/EUi6dKvkWh
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Este saco de gamuza color vino, con esos lentes y ese pañuelo son maravillosos. Parece recién salido de la barbería. pic.twitter.com/GacXhdXIEk
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El calcetín también es importantísimo, sobre todo si vas a depositar tu legado en el instituto cervantes. pic.twitter.com/05MMebQeaB
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Y para antes de poner tu Netflix, una piyama de franela y cobijita roja. ¡A descansar! pic.twitter.com/0atqvxC6op
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