El 27 de enero el medio AJ+ publicó en Facebook un vídeo sobre Las hijas de violencia, un colectivo feminista mexicano que nació en 2013 con un propósito: combatir la violencia cotidiana que viven las mujeres en el país. En seis días, el material se ha compartido más de 54.000 veces y ha alcanzado más de 4.000.000 de visualizaciones.
En el video se puede ver a Ana Karen, Ana Beatriz y Betzabeth Estefanía -integrantes de las Hijas de violencia- caminando por las calles de la Ciudad de México. Cada vez que un hombre las acosa, las tres jóvenes le disparan confeti y le cantan a todo pulmón el tema Sexista punk, que versa así:
"Eso que tu hiciste hacia a mí se llama acoso. Si tú me haces eso de esta forma yo respondo. No tienes derecho y lo que haces es de un cerdo (...) Sexista, machista, ¿qué es lo que tu quieres?"
"Me hablas como si me fueras a violar."Con pistolas de confeti y punk rock, estas mexicanas luchan contra el acoso callejero.
Posted by AJ+ Español on Wednesday, January 27, 2016
Hace tres años, las actrices de la Escuela Nacional de Arte Teatral -Ana Karen y Ana Beatriz, de 25 y 28 años respectivamente- se unieron para hacer una obra de teatro que reflejara lo que significa ser mujer. La idea inicial no estaba planteada con un enfoque feminista pero después de realizar la investigación, el discurso cambió.
“Comenzamos a encontrar diferentes subtemas de la violencia cotidiana y normalizada que recibimos las mujeres. Uno de los que más nos sacudió fue el acoso callejero. Descubrimos que era la muestra más pura de la legitimación de la violencia machista en el espacio público y a la vista de tod@s”, explican a Verne a través de un correo electrónico.
Fue así como las dos actrices llegaron a la conclusión de que el teatro se les quedaba pequeño para el impacto que necesitaban y decidieron realizar una performance. En 2015 se unió a ellas la artista visual Betzabeth Estefanía, de 24 años, para realizar la propuesta estética y visual del proyecto.
“Pensamos en una acción simbólica que pudiera lograr que, ante el acoso, la reacción fuera mirar al acosador y desaprobar su agresión en lugar de revictimizar a la mujer. Una canción y una pistola de confeti son inofensivos, pues no lastiman al agresor, pero simbólicamente es una respuesta que genera un impacto y sorpresa que el agresor no espera. Así el rol de poder cambia. El acosador normalmente niega haber acosado y trata de huir ante el miedo de ser ridiculizado. Es ese el objetivo de la performance”, detallan las integrantes del grupo.
Según las protagonistas del vídeo de AJ+, a partir de la publicación de este se ha avivado la polémica sobre si los piropos hacia los mujeres son agresivos. “Muchas mujeres han salido a decir que no quieren esos comentarios "positivos" hacia sus cuerpos si vienen de una persona extraña a quién no le han consultado su opinión. Los hombres, por su parte, responden negativamente (ante el video), pues aceptarlo significaría tener que asumir la responsabilidad de cambiar su conducta”, dicen.
Para seguir atacando la violencia hacia la mujer el grupo se comunica constantemente a través de su página de Facebook, la cual cuenta con más de 24.000 seguidores. En este espacio se publican denuncias de acoso y agresiones contra mujeres, se comparten talleres sobre feminismo y violencia misógina, se promueven eventos y se invita al público a algunas de las presentaciones que realizan en en la Ciudad de México.
Las hijas de violencia se leen satisfechas, pero sobre todo decididas a que en 2016 seguirán combatiendo la violencia misógina. “Lo hacemos porque tenemos la esperanza de que algún día todas podamos salir a la calle y no tener que sentirnos valientes por eso, sino libres”, finalizan.
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