Del "salid corriendo" a la solidaridad: las redes sociales en el atentado de Orlando

"Salid todos de Pulse y no dejéis de correr". Este fue el mensaje que alguien consiguió publicar en el perfil de Facebook del club gay Pulse de Orlando mientras Omar Mateen perpetraba en la madrugada del sábado el ataque homófobo que mató a 50 personas e hirió a 53.

Con esa llamada de emergencia online comenzó la retrasmisión en directo de la que ya es la mayor matanza en Estados Unidos, que ha sido reivindicada por el Estado Islámico.

Ese mismo post en Facebook sirvió de lugar de encuentro, de muro donde pedir y dar información y donde dejar mensajes de pésame. Una madre, por ejemplo, escribió media hora después de que el Pulse publicase su aviso, mientras la situación era todavía confusa y se hablaba de tiroteo y toma de rehenes: "Nada todavía. Mi hija todavía está ahí dentro. Por favor, seguid rezando por ellos. Está esperando a la policía para poder salir. Por favor, seguid rezando por ellos. Hablé por teléfono con ella y lo único que se oían eran disparos".

Otro usuario recordó que hasta que la situación estuviese resuelta, las autoridades pedían que no llamasen por teléfono a los rehenes, sino que escribiesen sms o mensajes a través de las redes sociales. "La gente podría estar escondida y no es conveniente señalar sus posiciones", recordó. Cuando todo pasó, un usuario describió en su Facebook la escena a la que se enfrentaron después la policía y los equipos de emergencia en el club, donde los teléfonos móviles de las víctimas mortales no dejaban de sonar.

Desde dentro, algunos rehenes tuiteaban peticiones de auxilio. "Por favor, avisad a la policía de que estamos escondidos en el vestuario, ha habido un tiroteo", avisaba un usuario, que tiene el perfil cerrado, citado por Mashable. "Cuatro seguimos escondidos. Han apagado las luces del bar. La policía ha llegado pero aún no nos han encontrado", escribía después. Un joven mantuvo una agónica conversación por WhatsApp con su madre pidiendo auxilio, en la que describía donde estaba y cómo se iba acercando el agresor. Finalmente le alcanzó y ha muerto este lunes por la mañana.

Mientras tanto los usuarios de la red social le enviaron ánimo a la madre de Facebook desesperada, que dos horas después, volvió al mismo hilo a anunciar que su hija estaba a salvo. "Mi vida ha vuelto", escribió aliviada. La prima de otro rehén anunciaba poco antes que su familiar era uno de los heridos, pero según contó, estaba estable. 

Ricardo J. Negron Almodovar, un usuario de Facebook que se encontraba en el local cuando empezó el ataque, escribió también en el muro del Pulse después de haber logrado escapar apenas una hora antes: "Yo estaba allí. El atacante comenzó a disparar sobre las dos de la madrugada. La gente de la pista del baile y de la barra se tiró al suelo y algunos que estábamos cerca de la barra y de la salida de atrás conseguimos salir al exterior y correr. Estoy a salvo en casa y espero que todo el mundo llegue a casa bien también".

La policía de Orlando también acudió a las redes sociales para dar información en directo sobre lo que ocurría en el Pulse. "Tiroteo en Pulse Nightclub en S Orange. Heridos múltiples. Eviten esa zona", anunciaban en un primer momento. También fueron dando detalles de lo que iba sucediendo para evitar que circulase información incorrecta: "Ese sonido era una explosión controlada de las fuerzas de seguridad. Por favor, eviten las inexactitudes en estos momentos", tuitearon después.

Además de las cámaras de televisión y los fotógrafos que se acercaron a captar imágenes del Pulse, quienes estaban dentro del club utilizaron herramientas como Vine para difundir en directo vídeos cortos de lo que estaba pasando dentro y fuera del local.

A pesar de que las autoridades facilitaron el acceso a la información en tiempo real, informando del número de víctimas, de que el asaltante había muerto, etc, pronto empezó a circular un bulo. La información falsa provenía en teoría de una víctima, que había recibido 12 balazos, y quien la difundía era supuestamente el jefe de su hermana. Según ese usario de Facebook, que ya ha borrado su mensaje -aunque los pantallazos siguen circulando-, el atacante estaba acompañado por otras dos personas que se habían escapado.

Pulse siguió publicando actualizaciones en su Facebook durante todo el domingo, incluyendo una campaña de crowdfunding para apoyar a las víctimas. En uno de sus mensajes pidió ayuda para el centro de donaciones One Blood, que necesitaba agua, zumos, fruta y aperitivos para los que estaban donando ante la respuesta masiva de los ciudadanos a la petición de sangre -aunque irónicamente, los homosexuales y bisexuales tenían prohibido hacerlo. Usuarios de otros Estados hicieron pedidos online a supermercados para que los llevasen a los donantes. El resto del día el club utilizó su espacio en la red para republicar fotos de homenajes recibidas desde todo el planeta y agradecer el apoyo.

Las redes sociales también sirvieron para tranquilizar a familiares y amigos de personas que podrían haber estado en peligro, ante la confusión y la falta de información inicial. Facebook activó, como hizo en los atentados de París y Bruselas, el botón que permite a los usuarios avisar a sus contactos de que que se encuentran sanos y salvos.

Después comenzaron los homenajes y los actos de duelo colectivo, como la concentración frente al Stonewall, el histótico club neoyorkino donde comenzó la reivindicación del orgullo gay después de los disturbios de 1969.

Buena parte de las reacciones en las redes sociales, en una sociedad como la estadounidense tan polarizada, ha girado en torno a la prohibición de las armas y a los derechos las personas LGTBI (lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexuales).

Uno de los tuis más replicado en las últimas 24 horas, con más de 120.000 retuits, contrasta la realidad estadounidense con la de su vecino del norte: "Canadá ha tenido ocho tiroteos en masa en 20 años. Estados Unidos ha tenido siete desde el lunes".

Otro usuario criticaba que uno "no está seguro en una guardería, un instituto, una universidad, cine, club o iglesia. Lo único seguro es la segunda enmienda". La que reconoce el derecho a tener armas. 

El atentado tardó poco en entrar en campaña, de la mano de Donald Trump, el candidato a la Presidencia de Estados Unidos, abiertamente antiislamicoy xenófobo. El líder republicano escribió en su perfil: "Agradezco las felicitaciones por haber tenido razón sobre el terrorismo radical islamista; no quiero enhorabuenas, quiero dureza y vigilancia. Debemos ser inteligentes". George Takei, conocido por interpretar a Mr. Sulu en Start Trek le contestó, en un mensaje que se ha retuiteado casi 50.000 veces: "Una vez  más, Donald, nos demuestras que no puedes dirigirnos. Han muerto 50 personas y tú te dedicas a disfrutar de unas felicitaciones".

En medio de la polémicas por las leyes de Estados conservadores que quieren prohibir a los transexuales usar baños públicos que no correspondan a su género de nacimiento, un político de Michigan escribió: "No quiero volver a oír que las personas LGTB son una amenaza para la seguridad pública en los lavabos".

Pero sobre todo, el día sirvió para reivindicar el amor frente al odio, a pesar del dolor y del miedo, con el lema #LoveIsLove. #GaysBreakTheInternet, para reivindicar el orugllo gay, también se convirtió en trending topic en la red social.

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