Todos los ciudadanos tenemos el deber de entregar cualquier objeto de valor que nos encontremos. Bien sea una cartera, o bien un décimo de lotería premiado con 125.000 euros, tal y como ocurrió en Santander el pasado 23 de diciembre, un día después del sorteo de la Lotería de Navidad. Ese día una señora anónima llevó un boleto premiado a la comisaría de Policía Nacional de la ciudad. No era suyo, se lo había encontrado por la calle. A día de hoy, según el Ayuntamiento de la ciudad, ya son nueve las personas que han reclamado el décimo. ¿Estará entre ellos el verdadero dueño?
El procedimiento a seguir en estos casos es claro. Tras consultar al juzgado de guardia y a los servicios jurídicos de Loterías y Apuestas del Estado, el décimo fue entregado al Ayuntamiento de Santander, ya que, según el Código Civil (artículos 615 y 616), la dueña provisional del boleto será la alcaldesa de la ciudad, Gema Igual. Desde el consistorio han confirmado a Verne que el décimo se encuentra depositado en una entidad bancaria y que la investigación está en marcha.
El pasado 22 de diciembre fue un día de suerte en la ciudad cántabra, ya que la Lotería de Navidad dejó 138 millones del segundo premio (el 51244) y una parte del Gordo (el 71998). Aún queda un décimo sin cobrar (por la cantidad que se ha difundido correspondería al segundo premio) y parece que el asunto irá para largo, ya que, por el momento, ninguna de las instancias de los candidatos a dueño del boleto han sido lo suficientemente convincentes como para que se dé por concluida la investigación.
El consistorio publicó, como indica el Código Civil, dos domingos consecutivos el hallazgo del boleto en El Diario Montañés. Las palabras exactas del anuncio decían: “Quien hubiere extraviado dicho décimo deberá acreditar haber sido poseedor del mismo, describiendo el número premiado, serie y fracción, así como las circunstancias expresadas en su dorso”.
¿Y qué pasará con los posibles dueños cuando termine la investigación? En principio, tal y como cuenta la abogada de Legálitas Nuria López a Verne, ninguna de las personas que han reclamado el décimo tendrá penalizaciones. “La única excepción se daría si uno de los posibles dueños hubiera denunciado la pérdida del décimo y luego se resolviera que no era el propietario, entonces sí se le podría acusar de denuncia falsa”, afirma. La letrada recomienda que en estos casos las pruebas fehacientes (el pago con tarjeta de crédito, una fotografía del décimo o conocer detalles como el número de serie) son lo más esclarecedor para resolver la investigación.
Si nadie consigue demostrar ser el dueño del boleto, el premio se le entregará a la señora que lo encontró. El Código Civil dice que “pasados dos años a contar desde el día de la segunda publicación sin haberse presentado el dueño, se adjudicará la cosa encontrada al que la hubiese hallado”. Si aparece el propietario, la compensación económica para la mujer será mucho menor, solo el 5% del premio: 6.250 euros.
¿Cómo demostrar que un décimo es tuyo?
Los décimos de lotería son al portador, es decir, que si te personas con un boleto ganador lo vas a poder cobrar, seas o no seas su propietario. Esto es lo que pasó en Lugo en 2014. Una mujer cobró un premio después de haberse encontrarse un boleto que llevaba escrito el nombre de "Inés". Tuvo que devolver el dinero, aunque el juez no vio indicios de robo. Existen algunos trucos, como el de Inés, que te ayudarán a reclamar un décimo si lo pierdes.
- ¡Denuncia! Eso siempre es lo primero, ya que puedes paralizar el cobro de tu décimo si es que ha resultado ganador.
- Escribe en el décimo tu DNI o fírmalo.
- Fotocopia el décimo. Esta medida es muy útil cuando se ha comprado entre varias personas. También conviene anotar el nombre y la cuantía que ha aportado cada uno.
- Envía fotos del décimo por WhatsApp. Crea un grupo con la gente con la que compartes el décimo y escribe todo tipo de detalles: cuánto dinero ha pagado cada uno, quién lo custodia hasta el día del sorteo…
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