"Que monten gifs, memes, fotos con el móvil... lo que quieran. Lo importante es que hagan suyos los cuadros del Thyssen", comenta a Verne Pepa Octavio de Toledo, responsable de Patrocinio y Mecenazgo del museo, sobre el reto que plantean a espectadores de entre 16 y 35 años.
El concurso propone seis obras de la colección de la pinacoteca para que los participantes hagan su propia adaptación y la compartan en Instagram con la etiqueta #versionathyssen.
La idea ya se puso en marcha en abril de 2019. El museo recibió más de 1.400 revisiones de sus clásicos y ahora repite. Los candidatos pueden presentar tantas propuestas como quieran y en el formato que quieran. "No importa tanto la técnica como que sean creativos", comenta de Toledo por teléfono. A través de este enlace pueden consultarse las bases del concurso.
Para "inspirar a los participantes y recordarles que no hay límites", el jurado formado por tres jóvenes artistas con gran seguimiento en redes sociales se suma al juego. Miranda Makaroff, invitada durante la primera edición del #versionathyssen, recreó con un autorretrato fotográfico un cuadro del siglo XVI: La ninfa de la fuente (1530 - 1534), de Lucas Cranach (El Viejo).
Esta vez el multidisciplinar Filip Custic, creador del universo visual de El mal querer de Rosalía, ha creado un gif a partir de Retrato de Giovanna Tornabuoni (1489-1490), de Domenico Ghirlandaio. Custic elige en esta segunda edición a los ganadores junto a María Herreros y Carla Fuentes.
Los ganadores se anunciarán el 20 de julio. Ese día, se abrirá el museo por la noche e invitará a los finalistas, ganadores y a los menores de 35 que se apunten a la velada (con concierto de Le Parody incluido) a través de la web del museo.
Quienes no tengan tiempo para presentar sus ideas, en septiembre habrá una tercera convocatoria y en diciembre una cuarta. "No tendría sentido hacerlo una sola vez, de forma aislada, si la intención es crear un hábito en un nuevo espectador. Y ojalá podamos hacer más de cuatro en 2020", comenta la responsable de #versionathyssen.
Estos son los seis ganadores de la primera edición de #versionathyssen.
Los museos españoles saltan a las redes sociales en busca de nuevas miradas
Los museos españoles recurren cada vez más a menudo a las redes sociales para hacer que sus colecciones sean más accesibles.
El Museo del Prado ofrece microclases de Historia del Arte a través de sus directos de Instagram, en las que destaca cada mañana una de sus obras o uno de sus artistas.
El Thyssen logró a finales de 2018 financiar la restauración de un Canaletto, La plaza de San Marcos en Venecia, gracias al crowdfunding.
"Planteamos la posibilidad sin estar muy convencidos, pero fue todo un éxito", recuerda a Verne Pepa Octavio de Toledo, la responsable de Patrocinio y Mecenazgo del museo de Tita Cervera.
La estrategia de comunicación en redes del Rijksmuseum de Ámsterdam, que está mostrando paso a paso en Internet y en directo en el propio museo la restauración de La ronda de noche (1642), de Rembrandt, es una fuente de inspiración para el Thyssen, asegura De Toledo.
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