Quédate con la copla

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En estos días de teletrabajo, he cambiado la radio que solía ponerme de fondo por los podcasts. En esta decisión tuvo mucho que ver en que sentía que estaba a punto de llegar al tope de noticias sobre el coronavirus y política que podía soportar. En mi búsqueda por toda la gama que ofrece Spotify di con ¡Ay, campaneras!, un podcast que va de copla y folclóricas, un tema que me enamora el alma. Así que me lo puse, me acompañó durante una jornada completa de trabajo y se convirtió de manera automática en uno de mis favoritos.

Como me pasa con todo lo que me gusta mucho, voy a insistir en él hasta convencerte para que lo oigas. Este podcast te adentra en el mundo de la copla y disecciona diferentes temas a través de ella, desde cómo sirvió de acompañamiento a las clases populares en la posguerra, a la visibilidad lésbica, la figura de las mujeres y el poder o el relevante papel de las madres en la copla. Y además da bastante gusto escuchar a alguien que sepa tanto del tema.

Grabar este podcast “era una idea que me venía rondando desde hacía tiempo pero nunca veía el momento de llevarla a cabo…comencé a grabar al inicio del confinamiento como una manera de ocupar, más que mi tiempo, mi cabeza”, me cuenta Lidia García, la creadora del podcast. García es investigadora predoctoral con una tesis sobre estética kitsch y género en la cultura visual digital en la Universidad de Murcia.

Que sus estudios giren también en torno a su afición por la copla, el cuplé y la zarzuela no es algo tuviera claro desde el principio: “Fue algo que se fue dando de una manera muy natural y de hecho he ido ajustando mi tema de investigación hasta que efectivamente ha acabado encajando con mi pasión”. Esta pasión le viene desde pequeña: “Desde niña escuché cantar coplas y zarzuelas a mi madre mientras hacía las faenas de la casa. Al igual que le sucede a tanta gente esta música siempre formó parte de mi vida y está fuertemente ligada, como dice la gran Martirio, a mi educación sentimental”.

García es más conocida en Twitter como @thequeercanibot, donde suele hablar de coplas, folclóricas y temas en torno a ellas con mucha gracia y memes, lo que ayuda a acercar esta parte de la cultura a un público más joven. “El éxito de las folclóricas en el humor de Internet -donde diría que constituyen casi un género propio- demuestra lo intergeneracionales que llegan a ser estas artistas y sirve también para poner en valor aspectos de su legado que tal vez no se apreciaron suficientemente en su momento”, comenta la creadora.

La copla “es un repertorio de estrategias femeninas para sobrevivir a la dictadura, a la pobreza, al patriarcado, a la vida”, dice García en el primer capítulo. Echando un vistazo en torno a esta temática, llevamos unos años ante la reivindicación de la copla, sobre todo desde una perspectiva feminista. “En los últimos años nuevas voces se han sumado a ese camino –pienso sobre todo en la maravillosa Mar Gallego y el papel de la copla en el feminismo andaluz–”, cuenta García. “Creo que tiene mucho que ver con la creciente necesidad de valorar las genealogías feministas que se han construido desde los márgenes: desde lo popular, lo sureño, lo que normalmente queda fuera del relato oficial…”.

Para la elaboración de los programas, que se publican de manera semanal (lleva publicados 10 episodios), García dedica “un rato al final de cada día para ir preparando de a poco el capítulo de esa semana y lo grabo y edito el mismo día que lo subo, normalmente el sábado”. En los programas se intercala su narración con canciones o fragmentos que ejemplifican el tema que está abarcando. De momento, el más exitoso es el dedicado a las madres (te lo recomiendo mucho, es de mis favoritos), en el que habla de la figura de las progenitoras en la copla, seguido de Coplas para seguir adelante y Folclórica contra folclórica, sobre visibilidad lésbica en la copla.

Aprendes un montón, la verdad. Y, si te pasa como a mí, es posible que te descubras canturreando las coplas que García intercala en el podcast, y dándote cuenta de que no habías sido capaz nunca de prestar atención a lo que decían. Aunque el objetivo de la creadora es el disfrute: “me encantaría que la gente disfrutara esta música de nuestras abuelas que a menudo ha sido tan ninguneada, en gran medida precisamente por su vinculación con lo popular y lo “femenino”: ojalá sirviera un poco para que aprendamos todos a amar sus luces y tratar de entender sus sombras”.

También me descubrí sufriendo una terrible morriña. La copla me recuerda a mi madre y a una de mis tías, que canta copla estupendamente cuando está con las faenas de la casa, como la madre de García. Y no sé cuándo voy a poder ver de cerca ni abrazar de nuevo a ninguna de ellas.

HEMOS ESTADO TRABAJANDO EN…

- Cómo es ligar por internet cuando tienes diversidad funcional. Las apps de ligue tipo Tinder han abierto un mundo de posibilidades para conocer gente nueva y potenciales parejas. Pero también han sido muy criticadas por dar una importancia excesiva a la imagen y a los físicos normativos, lo que afecta particularmente a quienes se alejan de ellos. Tres personas nos cuentan sus experiencias, desde el primer contacto virtual hasta la primera cita.

- Arte de todos los colores: obras que no podrás sacarte de la cabeza según tu color favorito. Matisse, Schiele, Van Gogh... Proponemos un viaje por el mundo del arte lleno de matices.

- Lectoras de la saga Valeria nos cuentan si su llegada a la treintena se parece a la de los libros. Hablamos con cinco personas que leyeron los libros de Elísabet Benavent cuando aún les quedaban algunos años para alcanzar la treintena. Nos cuentan cómo ha sido para ellas atravesar esa barrera de los treinta años y alcanzar la misma edad que la protagonista de su saga favorita. Ahora, Netflix los ha adaptado en una serie.

… Y NOS HA GUSTADO MUCHO LEER

1. La trampa de que las mujeres gestionan mejor (Cuartopoder). Este artículo cuestiona algo que hemos visto más de alguna vez en forma de tuit, vídeo o publicación de Facebook: el éxito en la gestión de esta crisis en países con una mujer al frente del gobierno. "Valdría la pena explorar si la buena gestión de la crisis tiene más que ver con el desarrollo de las políticas públicas que con lo que tienen debajo de las bragas".

2. Los virus blanquearon Andalucía (EL PAÍS). La imagen de pueblos de casas encaladas tan característicos de algunas zonas de Andalucía tiene su origen en las epidemias. “Las sucesivas epidemias de peste, fiebre amarilla o tifus de los siglos XVI al XIX fueron en buena parte culpables de esta obsesión [por encalar] que sobrevive como un rito social asociado a la higiene, la mudanza de las estaciones, la pulcritud y hasta la renovación tras la muerte”.

3. Las fotógrafa de la naturaleza de comienzos del siglo XX que fueron olvidadas (The New Yorker, en inglés). En otro capítulo de mujeres olvidadas por la historia, The New Yorker nos habla de Anne Brigman, que ayudó a moldear esa corriente fotográfica modernista, feminista y paisajística estadounidense de comienzos de siglo y cuya figura cayó en el olvido tras su muerte en 1950.

4. The Office recreado en Slack. Si eras fan de la serie, debes ver esto. Cada capítulo a través de un Slack al que puedes unirte.

5. Lola Flores: éxito, transgresión y pena. Este 16 de mayo se han cumplido 25 años de la muerte de la Faraona y EL PAÍS la homenajea con este especial sobre su historia, que es parte también de la historia de España.

ESTO HAY QUE VERLO

A falta de un documental, te recomiendo dos. Es lo que tiene que ahora me dé tiempo a hincharme a ver cosas, un sueño cumplido para mí. La primera de las recomendaciones es el de Michelle Obama en Netflix, Mi historia. La que fuera primera dama de los EE UU hace un tour de presentación de su libro autobiográfico y llena estadios. Además de contar anécdotas más o menos curiosas, destaca puntos interesantes de su vida: resalta cómo renunció a sus ambiciones profesionales por la maternidad (Michelle estudió en Princeton y se licenció en Derecho en Harvard), lo que la llegada de su familia a la Casa Blanca supuso para cierta población blanca estadounidense y que ella es descendiente de esclavos, por ejemplo.

El otro documental es Natalie Wood: Entre Bambalinas, de HBO. Wood fue actriz desde niña, participó en películas que son todo un clásico del cine, fue nominada a un Oscar y su muerte, cayó de su yate al agua una noche de 1981, está rodeada de misterio. Su hija Natasha rinde un homenaje a la figura de su madre, hablando con las personas que le rodearon, permitiendo conocer la figura de la actriz de manera íntima, más como la veía ella, y no deja fuera el asunto de su muerte.

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